El enfrentamiento verbal evidencia las distintas visiones entre Washington y Madrid sobre el equilibrio entre defensa y política social, en un contexto internacional marcado por la guerra en Ucrania y la presión para aumentar la inversión militar en Europa.
España pide flexibilidad en el cumplimiento del objetivo
Durante la cumbre de líderes celebrada en La Haya a finales de junio, la OTAN acordó elevar el umbral de gasto militar al 5% del PIB para 2035. España apoyó la declaración final, pero solicitó una interpretación flexible del compromiso, lo que motivó una carta del secretario general, Mark Rutte, garantizando cierta autonomía en el cumplimiento de capacidades.
Trump, en cambio, criticó que Madrid sea “el único país que no está al cien por cien”.
La posición española, según fuentes gubernamentales, se basa en que el aumento propuesto es “irreal y socialmente insostenible”. Con un PIB cercano a 1,3 billones de euros, alcanzar el 5% supondría elevar el presupuesto militar en más de 80.000 millones de euros anuales, una cifra considerada inasumible por el Ministerio de Defensa.
España insiste en que su compromiso con la OTAN “es total”, pero apuesta por un modelo de gasto eficiente y sostenible
| Año | PIB estimado (en millones €) | % gasto defensa actual | Objetivo OTAN | Diferencia |
|---|---|---|---|---|
| 2025 | 1.320.000 | 2,1% | 5% | +2,9 puntos |
| 2030 | 1.480.000 | 2,5% (previsto) | 5% | +2,5 puntos |
| 2035 | 1.650.000 | 3% (estimado) | 5% | +2 puntos |
(Fuente: estimaciones gubernamentales y previsiones OTAN)
Trump eleva la presión desde Washington
Desde el Despacho Oval y acompañado por Rutte, Trump declaró que el “problema con España se podría resolver muy fácilmente”, sugiriendo que Madrid deberá alinearse con el resto de aliados. El mandatario estadounidense reafirmó que EEUU es un “miembro orgulloso” de la Alianza Atlántica y que todos los socios “salvo España” ya han respaldado el objetivo del 5%.
El Gobierno español considera que sus aportaciones a misiones internacionales y su implicación en proyectos europeos de defensa compensan el menor porcentaje presupuestario. Fuentes diplomáticas recalcan que España mantiene más de 3.000 efectivos desplegados en operaciones aliadas, además de liderar misiones de vigilancia aérea en el Báltico y en Rumanía.
En Moncloa subrayan que el gasto militar “no se mide solo en PIB, sino en compromiso operativo y tecnológico”
Una discrepancia que tensiona la relación atlántica
La insistencia de Trump en un cumplimiento literal del 5% reabre un debate latente en la OTAN sobre la equidad del reparto de cargas. En el seno de la Alianza, países como Alemania o Italia también expresaron reservas sobre el nuevo umbral, aunque sin desmarcarse públicamente.
Para España, el reto será mantener su credibilidad internacional sin renunciar a sus prioridades sociales. El Ministerio de Defensa prevé elevar el gasto de forma progresiva hasta el 3% en 2035, centrando los recursos en modernización tecnológica, industria nacional y ciberseguridad.
El Gobierno español sostiene que “gastar mejor” es tan importante como gastar más
El pulso diplomático continúa abierto y podría marcar el tono de la cooperación transatlántica en los próximos años. La próxima revisión del compromiso está prevista para 2029, cuando se evaluará el grado de cumplimiento de cada país miembro.










