La automotriz estadounidense Tesla ha decidido incrementar el precio base de sus vehículos Model S y Model X en el mercado estadounidense tras una serie de actualizaciones que, según medios especializados, son más cosméticas que revolucionarias. Esta estrategia comercial se produce en un contexto de agitación para la empresa, marcada por la implicación política de su CEO, Elon Musk, y una pérdida de valor en Bolsa superior al 14% desde enero.
Cambios mínimos, subida máxima
Tesla ha presentado nuevas versiones del Model S y Model X con modificaciones como un diseño renovado de ruedas, cámara frontal adicional, iluminación ambiental dinámica, nuevos faros y una suspensión mejorada. Pese a la discreción de estos cambios, los precios han subido notablemente:
| Modelo | Versión | Precio anterior estimado | Precio actual |
|---|---|---|---|
| Tesla Model S | Long Range | 79.990 dólares | 84.990 dólares |
| Plaid | 94.990 dólares | 99.990 dólares | |
| Tesla Model X | Long Range | 84.990 dólares | 89.990 dólares |
| Plaid | 99.990 dólares | 104.990 dólares |
Tesla justifica el aumento con mejoras menores, destacando que el Model S Long Range puede ahora alcanzar 675 km de autonomía con una sola carga
El mercado responde con cautela
Pese al anuncio, las acciones de Tesla subieron este viernes un 1,94%, cerrando en 325,31 dólares. No obstante, la empresa acumula una pérdida bursátil del 14,23% en lo que va de 2025. Este descenso ha coincidido con la exposición pública de Elon Musk en el entorno político y sus polémicas declaraciones.
Aunque el anuncio de mejoras y subida de precios tuvo una recepción positiva inmediata en Bolsa, el contexto general sigue siendo desfavorable para la empresa
Musk, política y polémica
Elon Musk ha sido una figura central en la política de EEUU durante los últimos meses. Su apoyo a Donald Trump y su nombramiento como responsable del nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) generaron fuertes críticas. La tensión llegó al límite cuando Musk abandonó el Gobierno la semana pasada, tras rechazar el nuevo plan fiscal de Trump, provocando una disputa pública entre ambos.
