Malecón de La Habana
En definitiva, fue de lamentar, peligroso. Esperemos por la cuantía de las afectaciones en viviendas, redes eléctricas y principalmente en la agricultura, ese Talón de Aquiles de la economía cubana porque lo de la generación de electricidad es harina de otro costal.
Lo “terriblemente peligroso” fue lo visto en la televisión donde casi todo se circunscribió al plátano y al boniato. No voy a dejar para después mis disculpas a los posibles aludidos o involucrados que podrían ser unos cuantos.
Y he aquí una ventaja de ser mayorcito de edad. Recuerdos y memoria en acción. Antes, previo y post huracán, veíamos reportajes de grandes traslados de reses a lugares altos, protección de granjas avícolas y porcinas, recuperación de frutales (¿alguien ha visto una toronja en la Isla de la Juventud?), centrales azucareros resguardados y hasta cientos de caballerías de azúcar de caña o cítricos salvadas o perdidas por las lluvias y vientos…
Así, como enseña de barco pirata, tendremos ante nuestros ojos dos plátanos en simulación de tibias con un boniato en función de calavera, “que no corta el mar, sino vuela” como dijera el poeta.
Acceda a la versión completa del contenido
Terriblemente peligroso
Montar una exposición que realmente marque la diferencia es una tarea que mezcla ingenio y…
El debate sobre vivienda y seguridad ha dominado la conversación en 2025, pero el cuadro…
La jornada que debía ser un paseo triunfal por el centro se convirtió en una…
La 90ª edición de la Vuelta cerró este domingo con un hecho inédito. Las protestas…
La Vuelta se presenta como un evento neutral, pero en realidad refleja las contradicciones del…
La jornada, que debía ser un desfile festivo por las calles de la capital, ha…