Señor Presidente del Gobierno, estamos en la hora de la verdad y de las responsabilidades intransferibles, sin invocaciones altisonantes ni apelaciones al honor calderoniano se impone proceder dando una respuesta clara y distinta, cartesiana, sin vacilaciones, como corresponde al Jefe del Poder Ejecutivo de un país que se ha ganado el respeto en el concierto de las naciones y que debe ofrecer garantías inequívocas a todos los ciudadanos españoles incluidos los catalanes, ahora amenazados por la arbitrariedad de quienes deberían servirles y que se han puesto la Constitución por montera.
Acceda a la versión completa del contenido
Telegrama para Mariano Rajoy