De modo que su candidatura proporcionaba a Esquerra Republicana, que siempre alardea de pureza incontaminada, una ocasión pintiparada de pringarse. Veremos.

El telegrama de hoy, leído en Cadena Ser, va dirigido a la presidenta del Parlament.
Señora presidenta del Parlament de Cataluña, su elección que ya caía por la fuerza de la gravedad, en caso contrario, lo hubiera hecho por su propio peso. La avalaban sus laureles académicos, sus lealtades políticas a los puigdemones y, sobre todo, la preconizaba su imputación ante el Supremo por delitos de prevaricación, fraude a la administración, malversación de caudales públicos y falsedad documental.
De modo que su candidatura proporcionaba a Esquerra Republicana, que siempre alardea de pureza incontaminada, una ocasión pintiparada de pringarse. Veremos.