Una vez cerrada la operación, que está sujeta a las aprobaciones regulatorias pertinentes, Vivo –la marca con la que opera Telefónica en Brasil– poseerá el 75,01% de FiBrasil, mientras que Telefónica Infra ostentará el 24,99% restante, según Europa Press.
Con esta operación la compañía refuerza su posición en el segmento fijo en Brasil, que es uno de los principales mercados en los que opera la teleco junto a España, Reino Unido y Alemania.
El plan de Telefónica es seguir elevando su presencia en el mercado de fibra brasileño y mejorar la experiencia de sus clientes al tiempo que “contribuye a la digitalización del país”.
En ese sentido, la huella de la infraestructura de FiBrasil a finales de 2024 llegaba a 4,6 millones de hogares de 151 ciudades, por lo que, en total, la cobertura de la red de fibra de Vivo se situará en 30 millones de unidades inmobiliarias y empresas de 444 urbes, con un total de 7,2 millones de clientes conectados en el país sudamericano.
La integración de FiBrasil también está en línea con la estrategia de crecimiento de Vivo, centrada en la oferta combinada de servicios fijos y móviles.
De hecho, la solución Vivo Total, que combina la conectividad residencial y móvil en un único plan, cuenta con 2,7 millones de clientes y crece un 77% al año.
Cabe recordar que Telefónica se encuentra en pleno proceso de revisión estratégica de todos sus negocios y que se prevé que en el último trimestre del ejercicio se conozca su nueva hoja de ruta.
Las acciones de Telefónica han cerrado la jornada bursátil de este viernes con una caída del 0,22%, intercambiando cada título en los 4,48 euros.