Según CESM, “la exigencia de devolución de las tasas pagadas es claramente insuficiente para compensar el esfuerzo de tantos meses de preparación”. Además, incide, está el “agravio al que se enfrentan los opositores que se queden privados de la asistencia por un positivo” frente a quien pueda optar por no comunicarlo y acudir igualmente. Algo que pondría “en riesgo” al resto de aspirantes.
Ante esto, la Confederación exige a los responsables del Ministerio de Sanidad que articulen una solución para los afectados. “Si es posible facilitar la asistencia de contagiados en cuestiones como unas elecciones”, asegura, “también debe ser posible para un examen de tal importancia”. Entre las opciones está la de habilitar, por ejemplo, un aula concreta en la que se puedan presentar estos aspirantes. De hecho, destaca CESM, las propias instrucciones para las pruebas de este año, de 21 de enero de 2022, ya recogen la opción de que aquellos aspirantes que inicien “síntomas Covid durante la prueba deberán informar y serán trasladados a un espacio separado de uso individual”, sin que esto se haya hecho extensible a aquellos positivos por coronavirus.
“Se trata de la necesidad de encontrar una solución para un problema de salud pública”, incide este colectivo sindical, ya que “un positivo no tiene por qué suponer que la persona se encuentre en mal estado, pero sí necesita de una autorización o certificado para poder romper el protocolo general de aislamiento”.
Por todo ello, CESM exige a Sanidad que una solución inmediata ante las pruebas “decisivas” para los futuros especialistas del Sistema Nacional de Salud.
