En medio de la creciente polémica por la presunta trama de corrupción en la adjudicación de obras públicas en Navarra, la empresa Servinabar 2000 S.L. ha salido al paso de las acusaciones que la relacionan con el socialista Santos Cerdán, ex secretario de Organización del PSOE. La firma rechaza que el político haya tenido participación en su capital y defiende la legalidad de su actividad empresarial.
La empresa niega vínculos societarios con Cerdán
Servinabar ha emitido un comunicado categórico en el que afirma que Santos Cerdán “no ha sido nunca, ni es socio” de la compañía. El documento, firmado por el administrador único Joseba Antxon Alonso Egurrola, niega que exista “ninguna escritura” en la que Cerdán figure como titular de participaciones sociales.
Estas declaraciones se producen después de que la UCO hallara en el domicilio de Alonso Egurrola un documento que supuestamente demostraría que Cerdán era dueño del 45% de Servinabar, una de las empresas investigadas por haber recibido adjudicaciones por más de 75 millones de euros del Gobierno de Navarra.
Servinabar señala que el informe de la Guardia Civil contiene “numerosas e inexactas noticias” y que ni la empresa ni su administrador han sido imputados por ningún delito
Adjudicaciones, licitaciones y defensa de la legalidad
En su defensa, la empresa asegura haber actuado siempre “con respeto absoluto de la normativa vigente” y sin recibir trato de favor. Apunta además que sus cuentas son públicas y transparentes, y detalla que ha participado en más de 30 licitaciones en Navarra, obteniendo la adjudicación en solo cinco de ellas.
Una de las adjudicaciones más relevantes es la de la duplicación de los túneles de Belate, que también figura en el informe de la UCO. Sin embargo, Servinabar subraya que ni la adjudicación fue cuestionada por la UCO ni por la Cámara de Comptos de Navarra, que concluyó que el procedimiento fue legal.
La compañía insiste en que no se ha cometido ningún delito y exige rigor informativo para no dañar su reputación empresarial
Relación personal, pero no profesional
El comunicado admite que existe una amistad entre Alonso Egurrola y Santos Cerdán, aunque asegura que esta relación “ha sido ajena a las actividades profesionales de cada uno”. Con ello, la empresa busca desvincular al político de cualquier implicación en su actividad empresarial.
Advertencia a los medios y defensa reputacional
Servinabar ha solicitado a los medios de comunicación que contrasten la información “adecuadamente” antes de publicarla. Además, advierte que tomará medidas legales si se continúan difundiendo “informaciones falsas y calumniosas”.