Sánchez ha iniciado su intervención en el Comité Federal del PSOE, marcado por la renuncia de Francisco Salazar tras las acusaciones por “comportamientos inadecuados” de varias mujeres, reconociendo que tiene el “corazón tocado”, pero la “determinación intacta” y “las mismas ganas de plantar cara a la adversidad y volver a superarla”. Tiene la intención de seguir al frente del Gobierno.
Para ello, se ha comparado con el “capitán” de un barco, que “no se desentiende cuando viene mala mar, se queda a capear el temporal y salvar el rumbo”.
El líder del PSOE ha vuelto a pedir perdón tras las revelaciones en torno a Cerdán y ha dejado claro que “vamos a derrotar a la corrupción tanto dentro como fuera de la organización”. “Me equivoqué al depositar mi confianza en personas que no la merecían”, ha admitió, antes de dejar claro que los socialistas “no hacemos la vista gorda”. De esta manera, ha avanzado un protocolo contra la corrupción.
Medidas para “prevenir” y “combatir” la corrupción
Un conjunto de 13 medidas para reforzar el control interno del partido con el objetivo de “prevenir” y “combatir” la corrupción en las filas del PSOE. Un paquete de iniciativas que se agrupan en tres ejes. En primer lugar, ha defendido la necesidad de reforzar el equilibrio de poderes dentro del partido. Para ello, ha planteado establecer la existencia de cargos más colegiados e implantar la exigencia de doble firma para secretarios de organización y puestos clave de estructura orgánica, para una “excesiva concentración de poder”.
Además, ha propuesto regular plazos máximos de resolución de expedientes informativos y disciplinarios en supuestos casos de corrupción y mayor transparencia dentro del partido. En este sentido, ha puesto sobre la mesa la modificación del artículo 43 del estatuto del PSOE relativo a declaración de bienes y actividades, para que también sea presentada ante las comisiones de ética y garantías regionales.
Actualizar el portal transparencia para que incluir, antes de final de año, recomendaciones del Consejo de Transparencia y del Tribunal de Cuentas incluyendo “toda la información económica del partido”, además de subvenciones y ayudas y retribuciones anuales de todos los cargos.
Sánchez también quiere reforzar la Comisión Federal de Ética y Garantías para que reciba copias de todos los escritos de denuncias y actúe de oficio si considera que un asunto es de su competencia.
A todo esto hay que añadir, la elaboración de un protocolo de antifraude y anticorrupción.
Expulsión de los militantes que consuman prostitución
El líder del PSOE ha hecho referencia también a los audios machistas entre José Luis Ábalos y Koldo García conocidos en las últimas semanas. Algo “incompatible” con los valores y principios socialista. “Si pensamos que el cuerpo de una mujer no está en venta, en nuestro partido no puede haber cabida para cualquier comportamiento contrario a ello”, ha advertido.
En este sentido, ha planteado modificar el artículo 4.5 del Código Ético del Partido Socialista para incluir “nuestro firme compromiso con el abolicionismo de la prostitución y la expulsión inmediata de aquellos militantes que paguen por tener sexo”.
Anima a denunciar casos de acoso sexual
Con la polémica sobre las acusaciones a Salazar, Sánchez ha recordado, sin citar esta cuestión, que “hemos sido la primera organización en España en crear una oficina de cumplimiento normativo y un sistema interno de denuncias que asegura el anonimato de los y de las denunciantes”.
Dicho esto, ha manifestado que “cuando haya potenciales casos de agresión o de acoso sexual, yo le pido a las compañeras víctimas de estos acosos que utilicen estos canales, que las vamos a proteger”.