La financiación autonómica se ha convertido en uno de los debates clave de la legislatura. Sánchez recalcó que el modelo vigente ha quedado obsoleto y que el Ejecutivo ya ha empezado a actuar, con transferencias a cuenta por 300.000 millones de euros en esta legislatura y con la quita de deuda pactada con ERC en la investidura. Según el presidente, el objetivo es dotar a las comunidades de más recursos para sanidad, educación y servicios públicos esenciales.
Una condonación histórica
El Gobierno ha aprobado que el Estado asuma más de 83.000 millones de euros de deuda autonómica. Sánchez subrayó que esta decisión aliviará la presión presupuestaria y permitirá que las autonomías dediquen más fondos a los servicios básicos.
El presidente defendió que la condonación no es un privilegio para un territorio, sino una medida general que permitirá reforzar la igualdad y mejorar la calidad de los servicios en toda España
No obstante, comunidades gobernadas por el PP han criticado la propuesta, calificándola de injusta. Sánchez respondió que esa oposición es “dogmatismo puro y duro”, comparándolo con que un ciudadano rechazara que un banco le perdonara parte de su deuda.
Comparativa con los gobiernos del PP
El presidente del Gobierno también reprochó la gestión de las comunidades gobernadas por los populares. Puso como ejemplo la Comunidad de Madrid, a la que se transfirieron 45.000 millones de euros más en siete años de legislatura que durante los cinco años de Mariano Rajoy.
Según Sánchez, gran parte de esos recursos no se destinaron a servicios públicos. “De esos 45.000 millones, solo el 45% fue a sanidad, educación o políticas sociales; el resto se usó en regalos fiscales a los más ricos”, denunció. En su opinión, ocurre lo mismo en Andalucía bajo el liderazgo de Juanma Moreno.
La reforma de la financiación autonómica necesitará amplio respaldo político y territorial. Sánchez reconoció que las comunidades tienen cada vez más competencias y que el modelo debe reflejar esa realidad. El calendario aún no está cerrado, pero el compromiso es culminarlo dentro de esta legislatura.
El Gobierno asegura que todas las comunidades tendrán más recursos de los que cuentan hoy, y que el nuevo sistema garantizará proporcionalidad y sostenibilidad
El anuncio de Sánchez supone abrir una nueva etapa en el debate territorial. La condonación de deuda marca un precedente sin precedentes en la política financiera autonómica, pero la clave estará en el consenso para que el nuevo modelo logre mayor estabilidad y evite que la financiación se convierta en un arma de confrontación política.