Así lo ha planteado Ribó durante su intervención en la I Cumbre Internacional sobre Reducción del Tiempo de Trabajo y la Jornada Laboral de Cuatro Días, donde ha defendido que esta medida “debe venir precedida de un gran acuerdo social”. Para el alcalde se debe de “abrir un proceso de diálogo, junto con la Generalitat, con los agentes sociales, las entidades vecinales y las instituciones” en este sentido.
Según una nota del consistorio, Ribó ha señalado que “en Valencia queremos ser pioneros en el debate sobre una nueva regularización de la jornada laboral”. ¿El motivo? “Estamos convencidos de que las personas felices son más eficientes en el trabajo”, ha afirmado. También “que aplicando a los sistemas productivos algunos conceptos que sirven de base en la economía del bien común como la confianza, la cooperación y la solidaridad, podemos avanzar como sociedad de forma sostenible”.
Para ello, el alcalde ha propuesto la realización de una experiencia piloto previo acuerdo con los agentes sociales y todos los sectores implicados. “El objetivo sería que durante un mes todas las valencianas y los valencianos tengan, de forma efectiva, una jornada laboral de 32 horas semanales”, ha detallado.
Según el alcalde, “la experiencia de Valencia marcaría la hoja de ruta del futuro laboral y de los derechos de las personas a un trabajo digno y de calidad que les permita conciliar y mejorar su bienestar”.
