La edición 2024 del Informe sobre la Brecha Global de Género del Foro Económico Mundial deja una imagen ambivalente: mientras la igualdad de género avanza a nivel general —la brecha global se ha reducido al 68,8%, el mayor progreso desde la pandemia—, el acceso de las mujeres a puestos de alta dirección ha caído por tercer año consecutivo.
Este descenso representa una advertencia sobre la fragilidad de los avances logrados y sus posibles repercusiones económicas y sociales. La presencia femenina en la alta dirección global apenas ha crecido del 25,7% en 2015 al 28,1% en 2024, y se ha estancado desde 2022.
Desigualdad persistente en el liderazgo empresarial
A pesar de que las mujeres constituyen el 41,2% de la fuerza laboral mundial, solo el 28,8% de ellas ocupan altos cargos, según el informe, que analiza 148 economías. Esta brecha se acentúa en sectores donde el talento femenino asciende hasta cierto nivel, pero encuentra un techo a la hora de alcanzar el liderazgo.
Las promociones a niveles medios superan a las de alta dirección, lo que pone en riesgo la sostenibilidad del talento femenino
La directora general del Foro Económico Mundial, Saadia Zahidi, ha señalado que las economías que se acercan más a la paridad “se posicionan para un progreso más fuerte, innovador y resiliente”.
Islandia lidera el ranking mundial por 16º año
El informe vuelve a situar a Islandia como la economía más igualitaria del planeta, con un 92,6% de su brecha cerrada. Le siguen Finlandia (87,9%), Noruega (86,3%), el Reino Unido (83,8%) y Nueva Zelanda (82,7%).
En contraste, muchas economías en desarrollo y algunas avanzadas muestran estancamiento o retroceso en los indicadores de liderazgo y participación económica femenina.
La IA y las trayectorias no lineales abren nuevas oportunidades
El impacto de la inteligencia artificial está reconfigurando el mercado laboral, generando desafíos pero también nuevas oportunidades para el liderazgo femenino. Según datos de LinkedIn, las mujeres tienen un 20% más de probabilidades de haber tenido carreras profesionales diversas, lo que les aporta competencias transversales valiosas en la economía digital emergente.
Las mujeres están especialmente posicionadas para liderar en la nueva economía de la IA
Sue Duke, directora de Políticas Públicas de LinkedIn, advierte que para aprovechar este potencial, es fundamental impulsar la formación continua y eliminar barreras estructurales que limitan el acceso femenino al poder corporativo.