Esta federación de padres y madres de alumnos y alumnos critica que el Ejecutivo regional ‘venda’ como “novedosa” una construcción y ampliación de centros educativos que no es tal. “Casi el 100% de los centros anunciados llevan retraso en su construcción y o ampliación, algunos incluso más de diez años”, afirma. Y da cuenta de la situación “real” en la que se encuentran muchos de los centros anunciados.
Así, expone que el IES Malala Yousafzai (Madrid), “después de prácticamente una década demandándolo, abrió sus puertas en 2018, un año más tarde de lo previsto y con alumnado desplazado hasta la apertura en un centro privado concertado”. “Cinco años después aún sigue en obras”, lamenta la Giner de los Ríos.
En el caso del CEIP María de Villota, “estuvo tres años funcionando administrativamente, durante ese tiempo se desplazó al alumnado a otro centro educativo, situado en la UVA de Vallecas”. Según explica, “esta figura es la de creación jurídica del centro, popularmente conocidos como centros fantasmas”, algo que ha denunciado en reiteradas ocasiones. En la actualidad el centro sigue en obras.
Por su parte, el IES Rafael Frühbeck de Burgos, de Leganés, abrió sus puertas en 2014. “Año tras año la comunidad educativa sigue viviendo pendiente de las obras de ampliación” y “ya han pasado nueve años y continúa”.
Además del retraso de años en las obras, se han dado casos en los que el Gobierno de Ayuso no ha respetado los nombres acordados por la comunidad educativa. Así pasó con el CEIP Margaret Thatcher, que abrió en 2015 “ya con dos años de retraso respecto a la fecha prevista de apertura”. La mencionada comunidad educativa acordó llamarlo CEIP Nuevo Barajas, “pero la Consejería no lo respetó”.
“Podríamos seguir uno tras otro”, asegura esta federación, que pone un largo listado de ejemplos de centros educativos en los que no se han cumplido los plazos, con las consecuencias de esto para el alumnado.
“Este ‘ambicioso programa’, como lo denomina la Comunidad de Madrid, no es más que tergiversar actuaciones que llegan tarde y mal, retrasos de años, promesas incumplidas y acciones que están obligados a realizar”, critica la Giner de los Ríos, que ya no se creen las promesas de la Puerta del Sol.