España encara una campaña especialmente dura en la que la combinación de olas de calor, sequía y combustible acumulado en el monte ha tensado hasta el límite los operativos de extinción. En este contexto, sindicatos, colectivos profesionales, alcaldes y vecinos han salido a la calle para exigir responsabilidades políticas, refuerzos urgentes de medios materiales y humanos y un marco estable para los bomberos forestales. Reforzar la prevención y la coordinación interadministrativa se ha convertido en el punto común de la mayoría de reclamaciones.
La protesta no va solo de apagar fuegos: exige cambiar el modelo y poner la prevención en el centro
Sindicatos endurecen el tono ante la precariedad
Las centrales sindicales denuncian falta de personal, estacionalidad e infradotación de retenes durante los picos de riesgo. Reclaman que el Estatuto Básico del Bombero Forestal se desarrolle de forma efectiva para homogeneizar categorías, jornadas, descansos y retribuciones entre comunidades. Piden asimismo convocatorias de empleo estables, sustituciones garantizadas y refuerzos en logística, maquinaria pesada y aviación.
Más plantilla fija, mejores condiciones y una carrera profesional homologada
Bomberos al límite: turnos largos y falta de relevos
Cuerpos de bomberos forestales y brigadas helitransportadas describen turnos de 14 a 16 horas en grandes emergencias, con descansos insuficientes y relevos tardíos cuando coinciden varios frentes activos. Se reportan carencias en EPI, alimentación en línea de fuego y vehículos con demasiados años de servicio. Los profesionales advierten del riesgo de accidentes y del impacto del estrés térmico en plena ola de calor.
Sin descanso real y con equipos envejecidos el riesgo se dispara
Vecinos y ayuntamientos: del desamparo a la organización
En los municipios más golpeados, los desalojos, la interrupción de servicios básicos y el cierre de actividades agrícolas y turísticas han provocado un fuerte malestar. Los ayuntamientos piden que las ayudas se liberen con agilidad y que se habiliten ventanillas únicas para la tramitación de daños. En paralelo, se reclama un refuerzo de Protección Civil, planes de autoprotección y cortafuegos periurbanos en zonas de interfaz urbano-forestal.
Los afectados reclaman rapidez en las ayudas y planes de autoprotección eficaces
Medidas en marcha y debate competencial
Las administraciones han avanzado la declaración de zonas catastróficas para activar ayudas de emergencia, exenciones fiscales y líneas de reconstrucción. En el plano operativo, se insiste en mejorar la coordinación entre comunidades, UME, 112 y consorcios provinciales, con protocolos comunes y sistemas de información en tiempo real. El debate se centra en quién lidera cada fase: prevención, detección, ataque inicial y grandes emergencias La coordinación real y los protocolos únicos son ya inaplazables
Los datos del fuego: balance provisional
El balance acumulado de la campaña —a la espera de cierres definitivos— muestra miles de siniestros registrados, con decenas de grandes incendios y una superficie forestal afectada que supera ampliamente las cifras de un año medio. A continuación, una tabla orientativa con los principales indicadores que marcan la discusión pública y sindical
Los números confirman una campaña excepcionalmente exigente
Indicador | Valor |
---|---|
Conatos (<1 ha) | 3.541 |
Incendios (≥1 ha) | 1.559 |
Total siniestros | 5.100 |
Grandes incendios (>500 ha) | 24 |
Sup. arbolada afectada (ha) | 10.213,67 |
Sup. matorral/monte abierto (ha) | 19.696,38 |
Sup. pastos/dehesas (ha) | 11.588,10 |
Total superficie forestal (ha) | 41.498,16 |
Estimación adicional por grandes fuegos recientes (ha) | 97.291,81 |
Total estimado (ha) | 138.788,97 |
Nota: cifras provisionales de campaña, sujetas a actualización cuando se cierre el balance y se integren los grandes incendios más recientes
Qué piden quienes protestan
- Prevención todo el año: gestión activa del combustible, selvicultura preventiva, ganadería extensiva y agricultura para recuperar paisajes en mosaico.
- Operativos dimensionados al riesgo: más plantilla fija, refuerzos móviles y medios aéreos.
- Condiciones laborales dignas: jornadas, descansos, salud laboral y jubilación anticipada ajustadas a la penosidad.
- Coordinación e información: protocolos comunes, comunicaciones interoperables y datos abiertos para evaluar daños.
- Ayudas rápidas y transparentes para particulares, autónomos y pymes en los municipios afectados.
Un pacto político y social por la prevención y la profesión de bombero forestal.
Claves para el día después
Expertos y organizaciones insisten en que no basta con reforzar la extinción: la adaptación climática, la gestión del territorio y la planificación urbana serán determinantes para reducir la exposición al riesgo en los próximos veranos. Escuelas, asociaciones vecinales y empresas pueden participar en planes de autoprotección, simulacros y formación específica El reto es estructural: menos combustible en el monte y más resiliencia en pueblos y ciudades.