La crisis sanitaria y económica del Covid-19 se ha llevado por delante más de 800.000 empleos en dos semanas. Ninguna comunidad se ha ‘librado’ del impacto de esta pandemia, aunque las consecuencias en términos de afiliación a la Seguridad Social no han sido las mismas en todas. Así, el País Vasco se ha situado como la región en la que menos trabajo se ha destruido desde el pasado 12 de marzo, víspera de que Pedro Sánchez anunciara el decreto de estado de alarma. Andalucía, por su parte, ha sido la más castigada.
Según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones publicados hoy, el País Vasco ha registrado una variación del -2,69%, la más baja de todas las autonomías. Es más, Guipúzcoa ha sido la provincia con menos destrucción con un -2,26%. Asimismo, Vizcaya y Álava aparecen en los puestos de cola con el -2,69% y el -3,58%, respectivamente.
En el lado contrario, Andalucía encabeza el listado de comunidades afectadas con un -6,63%, y con una diferencia no muy acusada sobre la segunda, que es Canarias (-6,26%). En tercer lugar, la región valenciana (-5,78%).
Entre las seis provincias más golpeadas por la destrucción de empleo únicamente una de ellas no es andaluza: se trata de Alicante. De esta manera, según las cifras del departamento de José Luis Escrivá, en primer lugar está Cádiz, con una variación del -8,29%. Tras ella, Málaga, con el -7,89%; la mencionada Alicante, con el -7,30%.; Sevilla, con el -6,74%; Jaén, con el -6,50%; y Granada, con el -6,43%.
En los últimos puestos de este listado, además de las provincias vascas, se encuentra Lugo (-2,29%), Segovia (-2,35%), Teruel (-2,75%), Navarra (-2,80%) y Teruel (-286%), entre otras.
Respecto a Madrid y a Barcelona, están en torno al 4%. La capital del Estado ligeramente por encima (-4,05%), mientras que la ciudad condal no llega a esa cifra (-3,89%).
