Por su interés, ofrecemos a nuestros lectores este ‘telegrama’ enviado hoy por Miguel Angel Aguilar al Santo Padre. Beatísimo Padre, la credulidad ingenua, la picaresca atrevida, la simonía provechosa, forman una estela que decora lo sagrado y lo engarza con su profanación lucrativa. Ahí se inscriben las visiones de dudosa veracidad sobre las que nos pone en guardia. Se diría que la Virgen prefiriera aparecerse a los pastorcillos en lugar de a los registradores de la propiedad. Pero lo hace en contadas ocasiones, de Guadalupe a Lourdes y a Fátima. Como acaba de advertirnos Su Santidad, no es la jefa de correos que envía mensajes todos los días. Su aviso es que buscar cosas extrañas confunde. Conforme







