Pablo González Liberal, padre del susodicho, es el actual secretario general técnico del grupo parlamentario popular en el Senado. Figuró como sustituto en la candidatura de García Escudero para ocupar un escaño en el Senado por Madrid.
Lourdes Cavero Mestre, su esposa, trabaja como adjunta a la presidencia de la patronal madrileña, CEIM, de la que es titular el empresario Arturo Fernández (el empresario de cabecera de Esperanza Aguirre).
Isabel Gema González González, hermana del presidente madrileño, es en la actualidad diputada en la Asamblea de Madrid y cuarto teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Pozuelo, donde también es titular del Área de Gobierno y Gestión de Cultura, Atención al Ciudadano, Obras y Servicios, Distritos y Participación, concejal de cultura y portavoz adjunta del grupo municipal.
Pablo González González, hermano de Ignacio, ocupa ahora el cargo de director de estructuras comerciales de Mercasa, empresa dependiente de la SEPI. Antes fue director de inversiones en energía, tecnología e infraestructuras de Bankia hasta la salida de Rodrigo Rato.
Y concluyo: Carmen Cavero Mestre, cuñada de Ignacio González, que fue vocal del consejo de Caja Madrid Cibeles. Hasta su nacionalización fue una de las consejeras independientes de Bankia. En el año 2011 cobró un total de 173.000 euros.
No le he querido preguntar a qué viene esto (igual me tiene al teléfono toda la tarde), pero supongo que será porque al sucesor de Aguirre se le llena la boca cada vez que defiende su doctrina económica, el liberalismo- de boquilla, claro, porque luego todos chupan del bote del Estado-.
¡Ah!, por cierto, que también me ha pedido que os diga que debería de llamar la atención el hecho de que sea el bufete López Rodó & Cruz Ferrer el que ha elaborado los informes jurídicos de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM) contra la externalización sanitaria de Madrid. Me dice que no hace falta explicar quiénes son los socios de este despacho (al parecer todo el mundo con cierta edad lo sabe).
Hoy la AFEM, basándose en un nuevo informe de López Rodó, ha asegurado que el verdadero objetivo del presidente madrileño no es otro que privatizar la Seguridad Social, ya que lo que propone en los pliegos “no constituye una concesión de servicio público, sino un contrato de seguro de salud”.
