Con Villa lesionado y Torres fuera de forma, y sin jugar en el Chelsea, se ha reabierto el debate de quienes deberían ser los delanteros de la selección española en las siguientes convocatorias.
Y claro cuando esto ocurre, siempre sale un nombre, el de Raúl González Blanco, que en su exilio alemán sigue jugando a un gran nivel, siendo el delantero español después de Soldado que más goles lleva anotados esta temporada.
Por estadísticas, Raúl debería ser uno de los elegidos, pero aquí entran en juego muchas otras variantes, para empezar como se adaptaría a un grupo que junto Luis Aragonés le echó de la selección.
Es cierto que su ausencia ha coincidido con la edad de oro del fútbol español, pero algunos se preguntan si eso no habría ocurrido de igual forma con el delantero madrileño en la selección.
Hoy por hoy es más que evidente que delanteros como Llorente, Soldado o Negredo están por delante en el orden de prioridades de Vicente del Bosque, incluso dar la oportunidad a Adrián. Aunque se perdería una gran ocasión de dar un justo premio a quien ha sido el jugador referencia durante tantos años y que encima esta temporada se lo está ganando.
Cuando el jugador del Schalke era el capitán de la selección, muchos hablaron de que mandaba en el vestuario y que vetaba el acceso al equipo de otros jugadores. No se en que lugar deja esto a seleccionadores como Camacho, incluso a Luis Aragonés, que sí contó con él en sus primeras convocatorias.
Lo que está claro es que ahora si Raúl no es convocado las dudas sobre quién manda en ese vestuario volverán a estar de actualidad, ya se dijo en su momento que algunos jugadores del actual grupo no le querían en el equipo, no olvidemos que delanteros como Güiza fueron por delante de él, y con todos los respetos hay diferencias más que evidentes.
Entonces, los que acusaron a Raúl de boiotear la presencia en La Roja de, por ejemplo, Villa, estarían cometiendo el mismo crimen que tanto criticaron. Y claro, ahora no es el momento de tocar una fórmula que tantos éxitos ha conseguido.
El debate no es si va o no a la Eurocopa, sino que hay bajas y que hay un jugador seleccionable que está haciendo mejor temporada que otros, una leyenda del fútbol español y un ejemplo a seguir para muchos.
Y si hay algo en contra supera lo futbolístico, entra en un campo difícil de controlar, porque las animadversiones personales no son buenas consejeras a la hora de confeccionar una lista de una selección que en definitiva es de todos.
