De políticos, promesas y ambiciones, entre otras hierbas

Opinión

De políticos, promesas y ambiciones, entre otras hierbas

Hoy les voy a hablar de un par de comportamientos sorprendentes protagonizados por políticos. El primero ha tenido lugar en Perú, donde el alcalde de una localidad llamada Chilca juró su cargo recibiendo tres latigazos para recordar que debe cumplir sus promesas. El regidor, Abraham Carrasco, de 23 años, fue azotado por el ciudadano considerado más respetable de la zona, Cupertino Sáenz, en una curiosa ceremonia que pudo verse por televisión. Al parecer, Carrasco recibió, arrodillado ante un crucifijo y con la cabeza reclinada, los tres latigazos propinados por su verdugo, quien le exigió en quechua: “No seas ladrón, no seas mentiroso y no seas ocioso”.

Otra decisión que provoca estupor es la tomada por el gobernador de Mississippi, Haley Barbour, de liberar a dos hermanas en prisión desde hace 16 años, con la condición de que una le done un riñón a la otra. Si la medida es sorprendente lo es aún más el argumento con el que Barbour la justifica: el tratamiento de diálisis era una carga financiera para el Estado, aunque quizá se entienda mejor el ‘indulto’ si se tiene en cuenta que Gladys y Jamie Scott, fueron condenadas a cadena perpetua por el robo a mano armada de… 11 dólares, una pena desproporcionada ya que ninguna de las dos mujeres tenía antecedentes criminales y de que las víctimas del robo no resultaron heridas. Otras claves a no perder de vista son la movilización de la comunidad afroamericana por este caso y las aspiraciones presidenciales de dicho político republicano.

Más información