Iberostar, Globalia y Hotusa se le adelantan a Trump

Desde el malecón con...

Iberostar, Globalia y Hotusa se le adelantan a Trump

Donald Trump, presidente electo de EEUU
Capaces de probar fuerza y poner un cinco estrellas a veinte euros por noche durante doce meses con el único propósito de poner a correr a los demás. Lo que va a pasar dentro de unos años con las empresas turísticas españolas que operan en Cuba nadie puede asegurarlo, aunque algunos sabios futuristas opinan que no se podrá competir con el poder gringo, capaces de probar fuerza y poner un cinco estrellas a veinte euros por noche durante doce meses con el único propósito de poner a correr a los demás. Dos significativos hoteles a los que emisarios del magnate inmobiliario míster Trump le hubieran echado el ojo (y la pasta), a partir del uno de enero estarán bajo administración española: el Havana Riviera y el Copacabana. Este último porque el 4 de septiembre de 1997, un salvadoreño pagado por la ultraderecha miamense puso una bomba debajo de un butacón de mimbre donde se sentó poco tiempo después un italiano. La onda expansiva  desprendió un trozo de vidrio que cual navaja le cercenó una vértebra cervical y la arteria carótida  dejándolo muerto al instante. El Riviera, por su parte, y con el mafioso Meyer Lanski a la cabeza, ambos en el litoral habanero, fue un sueño que poco duró en el afán de convertirlo en el primero de una serie que sería construida a lo largo del Malecón como sustituto del negocio del juego en Las Vegas. Como dice la canción, “llegó el Comandante y mandó a parar”. Sobrevivió apenas un año antes de ser nacionalizado. Una cadena de ganado prestigio, la Iberostar, con doce instalaciones en la isla, será la que administrará este hotel  de  352 habitaciones  a partir del nuevo año en uno de los paseos marítimos más hermosos del mundo según los entendidos. Entretanto, debuta Globalia en el Copacabana con 168 habitaciones. El único hotel con piscina natural en la costa oeste de La Habana, en una inversión calculada en poco más de cinco millones de euros para la remodelación total y con el propósito de un “beach club” y un centro deportivo. Finalmente, la también española Hotusa ha firmado con Cubanacán Hoteles, propietarios del Riviera y Copacabana, un contrato de integración. La central de Reservas del grupo Hotusa, Restel, ha incorporado a su plataforma los casi 50 establecimientos de Cubanacán para su comercialización internacional. De modo y manera, contra todo pronóstico, se afianza la apuesta por Cuba. Lo que pudiera avecinarse en un futuro donde ni Nostradamus se atrevería a decir par de palabras, tendrá que negociarse, que para eso es la industria del ocio.

Capaces de probar fuerza y poner un cinco estrellas a veinte euros por noche durante doce meses con el único propósito de poner a correr a los demás. Lo que va a pasar dentro de unos años con las empresas turísticas españolas que operan en Cuba nadie puede asegurarlo, aunque algunos sabios futuristas opinan que no se podrá competir con el poder gringo, capaces de probar fuerza y poner un cinco estrellas a veinte euros por noche durante doce meses con el único propósito de poner a correr a los demás.
 
Dos significativos hoteles a los que emisarios del magnate inmobiliario míster Trump le hubieran echado el ojo (y la pasta), a partir del uno de enero estarán bajo administración española: el Havana Riviera y el Copacabana.
 
Este último porque el 4 de septiembre de 1997, un salvadoreño pagado por la ultraderecha miamense puso una bomba debajo de un butacón de mimbre donde se sentó poco tiempo después un italiano. La onda expansiva  desprendió un trozo de vidrio que cual navaja le cercenó una vértebra cervical y la arteria carótida  dejándolo muerto al instante.
 
El Riviera, por su parte, y con el mafioso Meyer Lanski a la cabeza, ambos en el litoral habanero, fue un sueño que poco duró en el afán de convertirlo en el primero de una serie que sería construida a lo largo del Malecón como sustituto del negocio del juego en Las Vegas. Como dice la canción, “llegó el Comandante y mandó a parar”. Sobrevivió apenas un año antes de ser nacionalizado.
 
Una cadena de ganado prestigio, la Iberostar, con doce instalaciones en la isla, será la que administrará este hotel  de  352 habitaciones  a partir del nuevo año en uno de los paseos marítimos más hermosos del mundo según los entendidos.
 
Entretanto, debuta Globalia en el Copacabana con 168 habitaciones. El único hotel con piscina natural en la costa oeste de La Habana, en una inversión calculada en poco más de cinco millones de euros para la remodelación total y con el propósito de un “beach club” y un centro deportivo.
 
Finalmente, la también española Hotusa ha firmado con Cubanacán Hoteles, propietarios del Riviera y Copacabana, un contrato de integración. La central de Reservas del grupo Hotusa, Restel, ha incorporado a su plataforma los casi 50 establecimientos de Cubanacán para su comercialización internacional.
 
De modo y manera, contra todo pronóstico, se afianza la apuesta por Cuba. Lo que pudiera avecinarse en un futuro donde ni Nostradamus se atrevería a decir par de palabras, tendrá que negociarse, que para eso es la industria del ocio.

Más información

Así lo ha hecho este domingo durante su visita al Centro de Coordinación Operativo Contraincendios de Ourense, donde ha estado acompañado del presidente de…
“Vemos que Rusia rechaza numerosos llamamientos a un alto el fuego y aún no ha decidido cuándo cesará las matanzas. Esto complica la situación”,…
España se prepara para un domingo marcado por el calor extremo, con hasta 18 avisos rojos activados por parte de la Aemet en amplias…