Josep Oliu pide que se forme “cuanto antes” un Gobierno “sólido” que sea favorable a la economía, los negocios y el crecimiento”. El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, ha vuelto a ‘mojarse’ sobre la situación política de España cuando se han cumplido 100 días de la celebración de las elecciones generales. Y lo ha hecho, para reclamar un Gobierno pro “negocios”. Hace dos años abogó por un “Podemos de derechas”
Con motivo de un encuentro con la prensa previo a la junta de accionistas que el Banco Sabadell celebra esta tarde, el banquero ha solicitado que se forme “cuanto antes” un Gobierno “sólido”, con una buena concepción de lo que se debe hacer y que sea “favorable a la economía, los negocios y el crecimiento”.
“Cuanto más dure la incertidumbre, más puede frenarse el pulso positivo de la economía”, afirmó ayer según recoge Europa Press, si bien ha reconocido que a día de hoy es incierto cuál puede ser el nuevo Gobierno central.
Oliu recordó que actualmente hay incertidumbres respecto a Cataluña, España, Reino Unido (Brexit), Europa, los tipos de interés, el precio del petróleo y la geopolítica internacional, lo que desincentiva la inversión.
“Sería más positivo si no hubiera las incertidumbres que hay. Cuánto más duren, y las incertidumbres internas se notan más, más van a frenar. Es un factor negativo”, sostuvo en esta cita con periodistas, aunque añadió que no se sabrá cuánto hubiese crecido el PIB sin estas incertidumbres.
Las declaraciones del presidente del Sabadell ha provocado que muchos se acuerden de unas palabras suyas hace ahora casi dos años en las que abogó por “una especie de Podemos de derechas” dirigido a la iniciativa privada y al desarrollo económico. “El Podemos que tenemos nos asusta un poco”, bromeó en la clausura de la conferencia sobre Mujer y Liderazgo de la que por entonces era la presidenta del Círculo de Empresarios, Mónica Oriol.
Para el responsable de esta entidad financiera, según recogió teinteresa.es en junio de 2014, existe la necesidad de crear un nuevo partido porque ni el PP ni el PSOE representan los “intereses empresariales”.
