El empresario Juan Antonio Salguero explica en la COPE que Artur Mas se limitó a ponerle en contacto con su jefa de Prensa. En la tertulia de la COPE se han centrado hoy en el escándalo de las comisiones del 3% por obras públicas para lo cual han contado con el testimonio de Juan Antonio Salguero, un constructor que declaró en su día ante la Fiscalía que abonó comisiones de hasta el 20% en 18 obras realizadas para Adigsa, la empresa pública de la Generalitat que gestiona las viviendas de diversos barrios por obras que se realizaron entre 2003 y al inicio de 2004.
Este pequeño empresario contó que le llamaron en su momento para hacer una serie de trabajos pero cuando fue a cobrar le dijeron que había que inflar las facturas un 20% o de lo contrario no se cobraba nada, algo que aceptó para poder cobrar pero que luego denunció.
Salguero dijo que se lo comunicó al que era conseller de Obras Públicas Felip Puig, que le contestó que iba a informarse y “hasta el día de hoy” no ha sabido nada más y también explicó que Artur Mas le contestó sus correos poniéndole en contacto con la jefa de prensa.
Asegura este empresario que el asunto pasó por muchas consejerías y tras haberlo denunciado ha estado amenazado con la cual prefirió marcharse de Cataluña. Al ser preguntado porque no se intentó recusar a la jueza, ha respondido que al tener que pagarse él los abogados el asunto era complicado. Además, confesó que tras el proceso se sintió “cansado” por la forma en la que se desarrolló.
Sobre la investigación judicial ahora en curso, que ha provocado la detención de dos tesoreros de Convergencia, Nicolás Redondo afirmó que aunque a Justicia es más o menos lenta, es una “maquinaria que funciona” y confía en que terminará funcionando también en Cataluña. También hizo notar que aunque a los políticos de todos los países la corrupción les produce vergüenza, en Cataluña estamos viendo que quien está concernido por la corrupción ni se avergüenza ni lo niega, de hecho considera que es el asunto es una instrumentalización de la justicia, una actitud que considera es el primer paso “para crear un Estado corrupto”.
Edurne Uriarte ha señalado que el problema es que “estamos ante un sistema en el que interviene el tesorero del partido, el propio gobierno de la Generalitat y los empresarios” puntualizando que “no solo tenemos este testimonio sino que tenemos todos los datos de la investigación y todos apuntan en la misma línea”. Y añadió que también “tenemos muchos datos que muestran que la propia Generalitat y la propia Convergencia ocultaban estas cosas”.
Antonio Jiménez ha agregado que le resulta chocante que ningún partido de la oposición mostrase interés en recusar a esta señora que es la esposa de alguien de Convergencia.
Redondo ha hecho notar, por su parte, que sería imposible que algo como esto pasara en Andalucía, en Madrid o en cualquier otra comunicad “ya que crearía un escándalo enorme” y opina que esto solo es soportable en Cataluña.
Uriarte ha agregado que “hasta ahora ha ocurrido lo que está diciendo Nicolás, Cataluña es una comunidad que se ha saltado la ley una y otra vez y no ha habido manera en que cumpliera y eso desgraciadamente ha tenido el apoyo de todo el nacionalismo y mucha pasividad por el resto de partidos”.
