El pasado 19 de marzo Bankia anunciaba que había completado en un tiempo récord -apenas dos meses y medio después de la fusión-, la integración tecnológica de BMN. Los resultados, sin embargo, no han sido tan satisfactorios como se podría esperar, según se lamenta UGT, que denuncia “oficinas colapsadas” y TPV que no reconocen las tarjetas, entre otros problemas.
La formación sindical, que habla de un “fiasco monumental”, destaca en una circular que “las oficinas procedentes de BMN están colapsadas de clientes, una gran cantidad de TPV no funcionan o no reconocen las tarjetas, y la banca ‘online’ no funciona fundamentalmente para Instituciones, empresas y autónomos, por lo que se han colapsado administrativamente y perjudicado sus intereses económicos”.
El “cabreo es monumental”, considera UGT, no solo por parte de los clientes sino también de los trabajadores que se sienten “impotentes ante las avalanchas de quejas, amenazas de cancelación de cuentas e incluso insultos y veladas amenazas”. La formación sindical exige responsabilidades porque “está claro que la decisión para que la integración se hiciera el 19 de marzo”.
“Probablemente hubiera sido necesario un mayor espacio de tiempo para la realización de la integración, que hubiera permitido la realización de las pruebas pertinentes y necesarias para que todo hubiera ido como la seda”, reflexiona UGT, que añade que “también se podía haber hecho la integración por paquetes y no todo a la vez, lo que hubiera significado detectar y solucionar los problemas en un ámbito más pequeño”.
“Alguien de la jerarquía de Bankia tendría que asumir responsabilidades y si no fuera así exigírselas quien debiera”, concluye UGT, que avisa de que “la competencia está pendiente de lo que ocurre e intentando pescar a rio revuelto”.
El pasado 19 de marzo Bankia anunciaba la integración tecnológica de BMN, permitiendo desde ese mismo momento a los clientes operar en más de 2.250 oficinas y más de 6.400 cajeros automáticos. En este proceso de integración, el banco que preside José Ignacio Goirigolzarri ha actualizado más de 22.000 dispositivos utilizados en las oficinas, como ordenadores, impresoras, tabletas de firma digital, servidores, dispensadores de efectivo o cajeros. Además, se han intercambiado más de 67.000 ficheros y unos 30 terabytes (Tb) de datos que corresponden a más de nueve millones de contratos de 1,7 millones de clientes.
Los 8,2 millones de usuarios de la entidad no tendrán que realizar ningún trámite, explicaba Bankia, que añadía que, aunque se modificaba el número de cuenta del cliente (código IBAN), las domiciliaciones de recibos cambiarían automáticamente y se abonarían en la nueva cuenta de Bankia.
