La fiscal general de Nueva York, Letitia James, ha presentado este jueves una demanda para disolver la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) por «años de irregularidades» e incurrimiento en «fraudes» y «abusos».
Según ha explicado James, la organización ha incurrido en numerosos delitos y ha desviado «millones de dólares en beneficio de los líderes de la asociación, así como para asegurarse contratos y obtener beneficios». Así, la demanda está también dirigida a cuatro individuos, entre ellos uno de los líderes más reconocidos de la NRA, Wayne LaPierre.
«La NRA está llena de fraudes y abusos, y es por eso que hoy estoy buscando su disolución, porque ninguna organización debe estar por encima de la ley», ha aseverado, según informaciones de la cadena NBC. James ha confirmado asimismo que la Fiscalía lleva desde abril de 2019 realizando una investigación al respecto en el marco de una campaña para resolver si la organización actúa, tal y como asegura, sin ánimo de lucro.
Fue ese mismo año cuando el entonces presidente de la asociación Oliver North abandonó el puesto alegando que la asociación se habría visto implicada en irregularidades financieras. Su salida puso en evidencia las fracturas internas de la organización y las luchas para hacerse con el poder.
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que la NRA se encuentra «bajo asedio» tras enterarse de que había una pesquisa abierta en su contra. Así, acusó al gobernador del estado neoyorquino, Andrew Cuomo, y a James de «utilizar ilegalmente el aparato legal del estado para destrozar una importante organización».
