El bloque opositor Syriza-Alianza Progresista (izquierda), de Alexis Tsipras, obtiene el 20,07% y 71 escaños. Le siguen el Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK, socialdemócrata, con el 11,46% y 41 escaños) y el Partido Comunista de Grecia (7,23% y 16 escaños).
El primer ministro Mitsotakis ya reafirmó que Nueva Democracia aspira a gobernar en solitario para sacar adelante las reformas y abordó con el líder de la oposición, Tsipras, la eventual fecha de nuevas elecciones, el próximo 25 de junio o el 2 de julio, en función de lo que duren los intentos de formar un gobierno de coalición.
A falta de una fuerza política con mayoría absoluta en las urnas, el presidente de Grecia pedirá al líder de la más votada que explore las opciones de un gobierno de coalición; y si estos esfuerzos no tienen éxito, lo encargará al dirigente del segundo y luego del tercer partido más votado. Cada uno de estos líderes dispondrá de tres días para realizar consultas sobre un gobierno de coalición, si bien tiene el derecho de rechazar esa opción de entrada o dentro del plazo asignado.
Si todas las gestiones son vanas, el presidente formará un gabinete interino, presidido por el titular de la Cámara de Cuentas, cuya función será organizar nuevas elecciones, y ordenará la disolución del parlamento que salió de las urnas este domingo y que se constituirá oficialmente el 1 de junio.
De repetirse los comicios, los diputados serán elegidos por listas de partidos y la fuerza más votada en las elecciones previas tendrá una ventaja de 40 escaños.
