Las carencias y los incidentes en los hospitales públicos madrileños vuelven a aparecer de manera continua. La semana pasada la rotura de una cañería protagonizó que cuatro quirófanos de la Urgencia del Hospital La Paz tuvieran que cerrarse. Y este martes otra cañería se ha roto, pero en el Hospital Ramón y Cajal.
El Sindicato de Enfermería (SATSE Madrid) ha alertado de la rotura de una cañería en la planta 11 del Ramón y Cajal. A diferencia del incidente sucedido en los últimos días en La Paz, esta vez no ha afectado a la asistencia médica, porque las salas afectadas sirven para formación.
Eso sí, la organización sindical ha remarcado que, “previsiblemente”, la programación de estos cursos de formación a los profesionales se verá afectada. Mientras, según SATSE Madrid, este nuevo caso deja en evidencia “la política de precariedad que se ha desarrollado en estos últimos años y que ahora pasan factura”.
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“El personal de mantenimiento de los grandes hospitales, grandes profesionales, se ven abocados a parchear unas infraestructuras que, durante años, han visto cómo no se invertía en ellas”, han recordado desde el Sindicato de Enfermería.
Así, los grandes hospitales públicos viven este tipo de escenas, como han reprochado las enfermeras: “Se han reducido sus presupuestos en mantenimiento y ahora ‘hacen agua’ por todos los lados, con infraestructuras que difícilmente aguantan el paso del tiempo”.
Por ello, han vuelto a reivindicar que la Comunidad de Madrid realice “una inyección urgente de dinero, que acabe con la imagen que se está dando de ella a pesar de la gran labor que realizan todos los profesionales que trabajan en el SERMAS”.
