El Santander reconoce que estudia un ERE en España pero descarta salidas traumáticas

Los ERE de la banca

El Santander reconoce que estudia un ERE en España pero descarta salidas traumáticas

Banco Santander espera cerrar el año con un beneficio ordinario de unos 5.000 millones de euros.

José Antonio Álvarez, consejero delegado de Banco Santander

El consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, ha reconocido hoy que la entidad pretende llevar a cabo un expediente de regulación de empleo (ERE) en España, pero ha descartado que el ajuste vaya a ser “traumático”. Así lo ha señalado hoy durante la presentación de los resultados del tercer trimestre, si bien ha descartado poner una cifra al recorte, que algunos medios calculan en unos 3.000 trabajadores.

El banco tiene intención de lograr unos ahorros adicionales de 1.000 millones de euros en Europa hasta 2022, lo que supondrá “ajustes de plantillas” tanto en el banco de España, como en los de Portugal, Polonia y Reino Unido, ha explicado Álvarez.

Las palabras llegan después de que esta mañana el diario Expansión haya publicado que el Santander podría realizar un ERE para 3.000 trabajadores en España, lo que supone un 11% de la actual plantilla. El banquero ha descartado confirmar esa cifra, “hasta que no se celebren las primeras reuniones con los representantes de los trabajadores”, algo que llegará “próximamente”.

“Lo que tengamos que hacer lo hablaremos primero con los sindicatos”, ha prometido Álvarez, que ha prometido que el recorte se realizará “de acuerdo con los sindicatos y de una forma correcta”. En ese sentido, ha descartado salidas “traumáticas” y ha recordado que en otros procesos anteriores se realizaron por ejemplo “procesos de recolocación que funcionaron muy bien”, con unas recolocaciones por encima del 85%.

Resultados de 2020

El Santander se anotó unas pérdidas de 9.048 millones de euros durante los nueve primeros meses de este año, frente a un beneficio de 3.732 millones de euros registrado un año antes, debido a que en el trimestre pasado registró una actualización del fondo de comercio de sus inversiones históricas y de los activos fiscales diferidos, lo que generó un cargo extraordinario sin efecto en caja de 12.600 dotaciones por 12.600 millones de euros.

En este contexto, el banco obtuvo un beneficio ordinario de 3.658 millones de euros en los primeros nueve meses de este año, un 33% menos que en el mismo periodo del año anterior, por las mayores provisiones relacionadas con la covid-19. En el año, el banco espera estar en un “entorno” de beneficio ordinario de unos 5.000 millones de euros, según ha señalado Álvarez, que de cara a 2021 augura “una buena tendencia de ingresos”, que junto a una “razonable contención de costes”, permitirán “seguir generando valor a los accionistas”.

El Santander sigue adelante con su dividendo a la espera del BCE

Por otro lado, el banco mantiene sus planes para poder pagar dividendo el próximo año. De hecho, hoy en su junta de accionistas ha aprobado un pago en efectivo de 0,10 euros por acción en 2021, sujeto a la aprobación regulatoria y otras condiciones. En ese sentido, Álvarez ha recordado que se espera que el Banco Central Europeo (BCE) se pronuncie en diciembre sobre si levantar o no el veto a los dividendos de la banca. “Esta en nuestra visión [este desembolso] pero “seguiremos las recomendaciones de los reguladores”.

En esa idea ha abundado el director financiero del Santander, José García Cantera, que, sobre los posibles baremos que utilice el BCE para dar permiso o no a los pagos, considera que el banco español se encuentra en una posición holgada. “Lo importante es el nivel de capital sobre el mínimo requerido”, ha razonado, y en ese caso “tenemos un exceso de 350 puntos básicos, que no está entre los menores de la industria”.

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