El ‘Silicon Valley’ de la ciencia en Madrid contará con su primer convenio tras ocho años de lucha

Madrid

El ‘Silicon Valley’ de la ciencia en Madrid contará con su primer convenio tras ocho años de lucha

Los trabajadores de las Fundaciones de Investigación Biomédica de la sanidad madrileña tendrán, a partir de otoño, un convenio muy peleado con la Comunidad de Madrid.

Movilización de profesionales de las Fundaciones de Investigación Biomédicas de la Comunidad de Madrid

Juan Ángel Fresno echa la vista atrás y se remonta hasta ocho años. Este investigador del Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital Universitario La Paz ha cerrado en estos días uno de sus trabajos más complejos tras mucho andado. No ha sido en la mesa del laboratorio: ha sido en una de negociación y enfrente ha tenido a la Comunidad de Madrid.

CCOO ha firmado el primer convenio específico para las Fundaciones de Investigación Biomédica de los hospitales de la sanidad pública madrileña. “Estamos satisfechos”, resume Fresno, presente en las negociaciones de la mano del sindicato y también presidente de la Asociación Nacional de Investigadores Hospitalarios, tras ver que ha sido ratificado por el 81% de la plantilla.

“Llevábamos mucho tiempo trabajando en conseguir un convenio”, recuerda este investigador a EL BOLETÍN. Es ahí donde arrancan los recuerdos: “El primer comité de empresa en una de estas fundaciones lo creamos hace ocho años”. Y la primera puerta que tocaron fue la de las propias fundaciones.

Descubrir la posible cura del VIH y no tener convenio colectivo: la vida de un investigador en Madrid

Leer más

Sin embargo, no iba a ser tan fácil. La respuesta de estas instituciones era la misma: “Que no dependía de ellos, que era de la Consejería”. Momento en el que Fresno comenzó los contactos con la Comunidad de Madrid. “Nos decían que teníamos que formar comités de empresas en todas las fundaciones hasta tener la mayoría para constituir una mesa de negociación”, apunta.

Al final, hoy hace dos años, el Ejecutivo madrileño decidió sentarse a hablar. Tampoco ha sido coser y cantar. O al menos así lo han escenificado las manifestaciones de la plantilla ante los rechazos de la Comunidad de Madrid. Todo en un contexto donde el ‘Silicon Valley’ de la ciencia en Madrid ve que el 90% de sus investigadores tienen contratos temporales y muchos en fraude de ley.

A partir de ahora, el optimismo para corregir esta temporalidad coge fuerza. “Han sido dos años de intensas negociaciones pero hemos apretado en los últimos seis meses, queríamos sacarlo antes de las elecciones porque, de lo contrario, habría sido empezar de cero”, relata Fresno que no olvida que en la Asamblea de Madrid lograron el apoyo de todos los grupos –menos PP-.

Pese a que el convenio no puede atacar directamente este porcentaje de precariedad, el investigador explica que los Presupuestos del Ministerio de Hacienda y el Ministerio de Trabajo podrán dar un impulso al sector. “Hay un acuerdo con el Gobierno a nivel nacional para reducir la temporalidad y eso mismo lo reclamamos para las fundaciones”, completa.

HEMEROTECA: Tambores de huelga de los científicos madrileños

Leer más

Lo que sí ataca lo firmado con la Comunidad de Madrid es la diferencia salarial. El acuerdo aborda una paradoja que se vivía en el día a día. Antes se podían juntar en un hospital un trabajador del centro y un investigador de estas fundaciones. Hacían el mismo trabajo pero con desigualdades a la hora de ver la nómina.

“A partir de ahora los profesionales de las fundaciones tendrán unos salarios que se equipararán con las tablas salariales cercanas a las del personal estatutario del SERMAS y se les garantiza una equiparación plena de su jornada de trabajo, licencias y permisos, además de la inclusión del teletrabajo”, celebran desde CCOO.

Fresno apostilla que estas diferencias en los niveles salariales estaban matando a las fundaciones de investigación: “Es una fuga de talento, la gente en cuanto podía lo dejaba para irse al hospital”. De hecho, el portavoz confiesa que este punto ha sido el “más difícil” a la hora de negociar con la Consejería de Sanidad.

“Hemos tenido que ceder, estamos más cerca”, admite. Según sus cálculos (ahora están a la espera de que la Consejería de Hacienda dé el visto bueno al texto por las tablas salariales), en otoño se podrá publicar el convenio. Una fecha donde ya se verá el primer incremento retributivo para los trabajadores.

Las lagunas del proyecto BioMad de Garrido: precariedad y riesgo de perder fondos europeos

Leer más

La estimación de CCOO pasa porque en enero de 2020 llegue a las nóminas la segunda inyección y que para enero de 2021 ya la última y definitiva. “Es una base sobre la que construir. Hemos conseguido ordenar un sector donde las 13 fundaciones eran distintas”, recalca Fresno.

De esta manera, se cierra un ‘tira y afloja’ de ocho años, aunque este investigador del Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital Universitario La Paz ya advierte de que van a tener que “seguir trabajando”.

Más información