El proceso de concentración del sector, el escenario de escasos márgenes por los bajos tipos, la irrupción de la banca digital… Por unas razones o por otras, raro es que pasen unas semanas sin que se ponga sobre la mesa un nuevo ajuste de plantilla en un banco. Tras un recorte de más de 85.000 empleos desde que se inició la crisis, el goteo continúa y sólo en los próximos meses podrían darse más de 7.500 salidas.
El primer ajuste que se espera es el de CaixaBank, con la mesa de negociación ya en curso. El expediente de regulación de empleo (ERE), enmarcado en el nuevo Plan Estratégico 2019-2021 que pretende una reducción del 18% de la red de oficinas, afectará en principio a 2.157 personas.
Después de Semana Santa se espera que empiecen las negociaciones entre la dirección de Banco Santander y los sindicatos por el ajuste que se llevará a cabo tras la integración de Banco Popular. Todavía se desconoce el número de afectados, pero diversos medios han especulado con la posibilidad del cierre de unas 1.000 oficinas que conlleven la salida de unos 3.000 empleados.
El pasado mes de noviembre el banco firmó un protocolo en el que se comprometió a no recurrir a los artículos de movilidad geográfica, modificaciones sustanciales de condiciones de trabajo y despido colectivo del Estatuto de los Trabajadores sin previo proceso de diálogo y participación sindical en búsqueda de soluciones consensuadas.
Si la compra del Popular conllevará un recorte en el Santander, también es previsible que la fusión que actualmente se negocia entre Unicaja y Liberbank siga un camino similar en caso de llegar a buen puerto. El mercado especula con una salida de hasta 2.500 trabajadores a pesar de que hace apenas unos meses Unicaja llegó a un acuerdo para acometer 760 prejubilaciones y 200 traslados voluntarios.
A la espera de que el Banco de España publique las últimas cifras de 2018, la banca española contaba al cierre de 2017 con 192.626 empleados, encadenando su noveno año consecutivo de recortes. En total, respecto al máximo de 278.301 trabajadores alcanzado en 2008, se han destruido 85.675 puestos en el sector.
Recortes en Europa
No sólo los bancos españoles están acometiendo un ajuste de sus plantillas. Recientemente el francés Société Générale anunció un ajuste de plantilla como consecuencia de la reorganización de su unidad de Banca Global y Soluciones a Inversores. La entidad recortará unos 1.600 trabajadores en todo el mundo, 750 en Francia. También afectará a otros países europeos como España, si bien el ajuste de plantilla será “mínimo” en el país, según han asegurado fuentes del sector a la agencia Europa Press. La entidad cuenta con unos 800 trabajadores en el país.
