El juez en excedencia ha ampliado su recusación contra la magistrada María Tardón y ha solicitado que se practiquen nuevas pruebas sobre sus vínculos con el PP y Blesa. Elpidio José Silva cree que, si alguien debe dictar sentencia sobre el caso Blesa, ese es el Tribunal Supremo. Y es que, el candidato de Movimiento Red ya se ve como eurodiputado. Si se cumplen sus vaticinios y obtiene un escaño en el Parlamento Europeo, pasaría a ser aforado, por lo que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid debería trasladar este caso al Supremo.
Logre o no sacar adelante su recusación contra la magistrada María Tardón el juez está convencido de que el proceso no se podrá reanudar hasta después de las europeas, por lo que sería el alto tribunal el que tendría que decidir su futuro.
De lograr que esta recusación salga adelante, algo para lo que habrá que esperar de ocho o diez días, Tardón sería apartada del tribunal que juzga a Silva, así como el resto de integrantes del mismo, ya que, según ha asegurado este juez a ElBoletin.com, han tenido acceso a las pruebas.
Esto obligaría al nombramiento de tres nuevos miembros para este tribunal, con la consiguiente dilatación temporal del proceso retrasándolo hasta junio, según los cálculos de Silva.
Igualmente, de ser rechazada la recusación a Tardón, este proceso judicial seguiría su cauce habitual en el Tribunal de Justicia madrileño en plena campaña a las elecciones del 25 de mayo y, en caso de que Silva consiguiera un escaño en el Parlamento Europeo, podría acabar en el Supremo, según los escenarios que el propio juez ha dibujado.
El juez en excedencia se enfrenta a 30 años de inhabilitación por haber encarcelado a Miguel Blesa.
