Navarro selló ayer un acuerdo con Mas para impulsar BCN World que choca con las críticas del PSOE al macrocomplejo de casinos que Adelson iba a construir en Alcorcón. El PSC ha puesto de nuevo contra las cuerdas a la dirección nacional del PSOE y a su líder, Alfredo Pérez Rubalcaba. El motivo no es otro que el complejo de ocio y turismo BCN World, conocido como ‘Eurovegas catalán’. El pacto suscrito ayer entre Pere Navarro y Artur Mas para su construcción choca de lleno con la oposición de los socialistas al desembarco en Alcorcón de los casinos de Sheldon Adelson.
Ferraz ha visto como, una vez más, el Partido Socialista de Cataluña (PSC) le mete en un aprieto. Mientras Rubalcaba compartía ayer escenario en Madrid con Elena Valenciano, Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero, Tomás Gómez y Martin Schulz, Pere Navarro hacía lo propio con Artur Mas.
El presidente de la Generalitat y el líder del PSC oficializaban en un acto conjunto su acuerdo para impulsar BCN World y reivindicaban la necesidad de grandes pactos para que “Cataluña avance”. Esta unión no sólo facilita la construcción de este macrocomplejo de ocio con, entre otras cosas, una rebaja del 55% al 10% de los impuestos al juego en los casinos del complejo; sino que supone un balón de oxígeno para Mas.
El nacionalista catalán puede continuar presumiendo así con el atractivo que esta región tiene para los inversores, sean nacionales o extranjeros, sin necesidad de recurrir a ERC, que no veía con buenos ojos este proyecto.
El guiño de Navarro a Mas también es un torpedo en la línea de flotación al PSOE. Y es que, choca de lleno con el discurso que los socialistas han mantenido en Madrid en torno a Eurovegas, un complejo de casinos y ocio muy similar al que se realizará en Barcelona.
Durante varios meses, desde el PSOE madrileño se ha cargado públicamente contra el desembarco de Sheldon Adelson en Alcorcón. Unas críticas avaladas por Ferraz que también se oponía a la construcción de estos casinos y hoteles y que al final han surtido su efecto, ya que el magnate renunció a este proyecto.
Ahora, el ‘sí’ de Navarro a Mas pone de nuevo en evidencia a la dirección nacional del partido y a su líder, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ve cómo el PSC va a su aire.
