El presidente del Gobierno, en su respuesta al PNV, se limita a insistir en la necesidad de que la banda terrorista se disuelva. Mariano Rajoy ha roto su silencio sobre ETA y la visita de los verificadores internacionales que tuvo lugar la semana pasada. Eso sí, lo ha hecho para hablar del tema poco más de un minuto. Este es el tiempo que el presidente del Gobierno ha dedicado a la banda terrorista en su respuesta a la intervención del portavoz del PNV, Aitor Esteban, en la que ha insistido en la necesidad de la disolución de ETA.
“La solución es muy clara, que ETA se disuelva”, ha asegurado Rajoy en la segunda jornada del Debate sobre el Estado de la Nación, contestando así las preguntas de los nacionalistas catalanes. El jefe del Ejecutivo no se ha limitado a estas palabras y ha señalado “¿por qué tengo que darle yo algo (a la banda) a cambio y qué?”. Un mensaje de firmeza ante ETA aplaudido por la bancada del PP.
Antes de los aplausos, Rajoy ha defendido su silencio sobre las últimas noticias en torno a los terroristas, como la visita de los verificadores o el supuesto desarme. “Yo no he dicho que no haya cambiado nada sobre ETA” porque, en su opinión, “no merece la pena”.
El presidente del Gobierno daba así la réplica al portavoz del PNV que, previamente, había cargado contra la “desidia” de Rajoy, que hace que “ETA siga prolongando la teatralización de su final”. “No es el momento para seguir con una política antiterrorista como si nada hubiera cambiado”, porque “no puede ser el jefe de Policía el que marque la política del Estado”, ha considerado Esteban.
“Ante la falta de voluntad de su Gobierno, hasta aquí hemos llegado. Faltar el respeto a unas personas independientes que están haciendo lo que pueden para que ETA se desarme no es de recibo. ¿Quieren darle la excusa a ETA para que eternice su desaparición?”, ha criticado el nacionalista vasco, en una clara defensa a la Comisión Internacional de Verificación. “El tiempo de boleros ya ha pasado señor Rajoy, hay retos que afrontar aquí y ahora”, ha concluido.
