Los trabajadores de este servicio han iniciado hoy paros indefinidos contra los despidos que planea la concesionaria Clece, filial de la constructora de Florentino Pérez (ACS). La huelga indefinida de los trabajadores de la limpieza del hospital Ramón y Cajal ha empezado con éxito. Así lo han indicado los sindicatos, que han cifrado en un 90% el seguimiento de estos paros convocados contra los despidos que planea la concesionaria del servicio, Clece, una filial de la constructora de Florentino Pérez (ACS).
Según ha indicado UGT en un comunicado, el seguimiento del primer día de huelga se “valora positivamente” porque está siendo respaldado “por el 90% de la plantilla”. El sindicato, uno de los convocantes junto a CCOO y CGT, asegura que “los servicios mínimos se están cumpliendo al 100%”.
Los paros indefinidos están motivados por los planes de reestructuración que Clece pretende acometer en el hospital, unos planes que según los sindicatos supondrán el despido de 63 trabajadores tras haber prescindido la empresa ya de más de 40.
Estas organizaciones han denunciado que los ajustes previstos por la empresa del presidente del Real Madrid son “muy grandes” y podrían mermar la calidad del servicio, poniendo incluso en riesgo el cumplimiento de las mínimas condiciones de higiene y salubridad exigidas para un hospital de las dimensiones del Ramón y Cajal.
Asimismo, los sindicatos se han quejado de que los planes de Clece también van a afectar a las condiciones laborales de los trabajadores, por lo que esperan que con esta huelga la compañía reconsidere su postura e inicie las negociaciones con los representantes de los trabajadores para alcanzar una solución.
Los servicios mínimos fijados para los paros son de cerca del 65% durante el turno de mañana (78 empleados), del 77% por la tarde (59 personas), y de casi el 89% para el turno de noche (8 personas), algo que los sindicatos han calificado como “abusivo”.
