Los republicanos quieren que el líder de CiU acceda a que la pregunta sobre la soberanía catalana sea explícitamente sobre la independencia. Esquerra Republicana ha dejado claro sus intenciones al presidente de la Generalitat, Artur Mas, con respecto al tema soberanista. La fuerza política ha afirmado que si el líder de CiU no accede a que la pregunta sobre la consulta soberanista sea sobre la independencia, se desmarcará del pacto por la consulta.
«En un acuerdo por una mala pregunta Esquerra no estará», ha dejado claro la portavoz del partido, Anna Simó. El malestar de los republicanos ha aumentado desde la semana pasada, cuando Mas y el líder de ICV, Joan Herrera, escenificaron un acercamiento para que la formulación de la pregunta deje contentos a los partidarios del federalismo.
«Una pregunta clara, honrada, de respuesta sí o no y que todo el mundo entienda. La gente salió a la calle por la independencia y se le debe preguntar sobre esto», han aclarado los republicanos.
Se trata de una situación complicada, puesto que si ERC se descuelga del proceso CiU pierde al socio que sostiene su gobierno. Por ello los republicanos también avisan que en su mano está aprobar los Presupuestos de 2014. «Teníamos muy claro que lo que convenía en esta legislatura era estabilidad parlamentaria para tirar adelante la consulta. Cualquier actuación que no vaya en la línea de que el pueblo vote su futuro por ser o no ser un estado independiente en Europa es incumpir los compromisos que hemos tomado», ha subrayado Simó.
Asimismo, también han expuesto sus deseos de que la sociedad civil independentista presione al Gobierno catalán para que convoque un referéndum secesionista. La portavoz republicana ha evitado llamar a la movilización, pero sí ha enviado un mensaje para «concienciar a los ciudadanos de su poder».
