El secretario de Estado cree que las críticas a la nueva ley de Seguridad Ciudadana son un “discurso prefabricado”. El secretario de Estado cree que las críticas a la nueva ley de Seguridad Ciudadana son un “discurso prefabricado”.
El secretario de Estado de Seguridad ha aclarado que la nueva Ley de Seguridad Ciudadana no penará la “mera captación” de imágenes de las Fuerzas de Seguridad, sino el uso «malintencionado, lesivo y agresivo” de las fotos.
El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, ha asegurado en la COPE que la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, a la que le queda un largo recorrido parlamentario, no pretende “restringir ningún derecho fundamental” sino regular situaciones que en el nuevo Código Penal no se recogen, y pueden penarse con sanciones administrativas. En este cambio, ha añadido Frascisco Martínez, «hay muy poco de reaccionario, más bien todo lo contrario.
Martínez ha explicado que la nueva ley no penará la “mera captación” deimágenes de las Fuerzas de Seguridad, porque reconoce que es una libertad fundamental, como es la libertad de expresión y el derecho a la información. Pero ha aclarado que la norma sí penalizará su uso “malintencionado, lesivo y agresivo”para convertir a los agentes que están “garantizando el ejercicio del derecho de manifestación” en víctimas de ataque “o poner en riesgo el éxito de la operación”.
Ante las críticas que el anteproyecto de ley ha provocado en los partidos políticos de la oposición, Martínez ha manifestado que el texto está en una fase muy preliminar, le queda aún “mucho camino” y no está decidida su redacción definitiva. En su opinión, las críticas obedecen a “un discurso prefabricado”.
En cuanto a la cuantía de las multas previstas, hasta de 600.000 euros, Francisco Martínez ha recordado que son las mismas que recoge la ley de 1992 y la ley de Violencia en el Deporte de 2007.
El anteproyecto de ley orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana ha desatado la indignación entre los partidos de izquierda y en las redes sociales por considerarse anticonstitucional, franquista y retrógrado.






