Ana Botella afirma tajante que mientras sea alcaldesa no se privatizará la EMT, pero ni oposición ni sindicatos están tranquilos con la situación de una empresa, que registraba superávit hasta 2010 y que ahora está en pérdidas. La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha sido tajante al afirmar que mientras que ella esté al frente de la Alcaldía «no se privatizará la Empresa Municipal de Transportes (EMT) y asegurar que quien diga lo contrario apunta «algo que no se corresponde con la realidad».
Pero a pesar de la contundencia de la regidora, ni la oposición ni los sindicatos las tienen todas consigo. Las cifras hablan por sí solas y son preocupantes: desde 2010 la EMT cuenta con 180 autobuses menos y se ha eliminado recientemente el búho-metro, a lo que se unen los ajustes que sufrirán las líneas universitarias y otras línea diurnas a partir del 13 de enero de 2014, según explicaba esta semana en rueda de prensa el secretario del Comité de Empresa, Elías Calderón.
Lo que se une al hecho de que la dirección de la EMT haya plantado en el consejo de administración de la compañía su intención de rebajar en un 7,5 % el sueldo de sus empleados en 2014 y un 0,5 % en 2015, según fuentes sindicales.
El portavoz del grupo municipal socialista, Jaime Lissavetzky, cree que la situación es tal que es momento de instar a que los madrileños “salvemos a la EMT, ya que teme que emblemática empresa pública puede acabar desmantelada o privatizada por la pésima gestión que ha realizado el Ejecutivo de Ana Botella: “La alcaldesa recibió una empresa en superávit y la ha condenado al déficit, poniéndola en riesgo. Ahora, pretende que sean los ciudadanos y, especialmente, lo trabajadores quienes paguen sus errores”, sentenció.
El edil socialista considera que la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha puesto en peligro a la EMT (que hasta 2010 registraba superávit) puesto que, con la reforma local, las empresas municipales que registren pérdidas (y en el último ejercicio, la EMT cerrará con pérdidas por valor de nueve millones de euros) deberán desaparecer o externalizar el servicio.
Y critica que el Consistorio en lugar de buscar soluciones que fomenten el uso de transporte público, ha pretendido subsanar la situación deficitaria con la venta de parcelas que nadie compra. “Ya van por la cuarta subasta”, ha apuntado el portavoz.
De hecho, y según la responsable de Movilidad y Medio Ambiente del grupo, la edil Ruth Porta.la situación de pérdidas de la EMT no se debe al servicio que presta la empresa, sino a las decisiones poco acertadas que ha tomado el equipo directivo en cuestiones como la explotación de la publicidad, “que arroja pérdidas de casi 8 millones de euros”, y a los “graves errores en las estimaciones del mercado inmobiliario a la hora enajenar determinadas parcelas”.
Estas cuestiones han desatado las alarmas entre los socialistas madrileños y el PSOE ha anunciado que presentará una proposición para blindar el carácter público de la EMT y asegurar el mantenimiento de plantilla y sueldos.
Dicha proposición socialista contempla que el Ayuntamiento emplee parte de los 130 millones de euros que le ha reportado la venta de su participación en Metro de Madrid en salvar a su propia compañía de transporte público, la EMT, considerada la ‘empresa estrella’ del Consistorio.
Asimismo, plantea la elaboración de un plan económico-financiero para 2014 y 2015 –esto es, hasta las siguientes elecciones municipales- que asegure el mantenimiento de la plantilla y de los sueldos convenidos.
La empresa municipal más importante
Y cual es la respuesta que da Ana Botella a las acusaciones de PSOE y sindicato, puesto tanto la alcaldesa como el ldelegado de Medio Ambiente y Movilidad, Diego Sanjuanbenito, coinciden en que con este equipo de gobierno al frente “nunca se va a privatizar la EMT”.
Sanjuanbenito ha definido a la EMT como “la empresa más importante del Ayuntamiento” y una de las más relevantes de España en lo que a transporte urbano se refiere. Es, en sus palabras, «moderna, limpia y eficiente», además de destacar en toda Europa. “Haremos todo lo que tengamos que hacer para garantizar la viabilidad y mantenimiento de su empresa y lo haremos de la mano de sus trabajadores», de quien ha resaltado su “experiencia, calidad y capacidad”.
Y ha insinuado en que estas acusaciones se deben a que se está negociando el convenio colectivo y los sindicatos quieren presionar. Concretamente, lo que ha dicho Sanjuanbenito es que el 31 de diciembre concluye el convenio colectivo en la EMT, motivo que podría ser utilizado y “magnificado” por algunos “para llevarlo a otros
También ha recordado a los sindicatos la “muy importante” bajada de viajeros, agudizada este año. “Los madrileños no tienen que pagar los autobuses vacíos”, señaló, aunque luego rebajó un poco el tano y recordó que el objetivo del Ayuntamiento, en todo caso, pasa por “el mantenimiento del empleo dentro de la empresa”.
