Esperanza Aguirre ha reaparecido hoy públicamente en el primer acto en sociedad que ha dado la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, tras el fiasco de la candidatura olímpica. Y lo ha hecho, robando todo el protagonismo a la esposa de José María Aznar. La presidenta del PP autonómico ha acaparado todos los focos ante los rumores de su posible candidatura al Ayuntamiento de la capital en 2015. Un posible destino que no ha rechazado del todo.
“Yo ya no estoy en la primera línea”, ha asegurado Aguirre ante un tumulto de periodistas y cámaras que, a codazos, trataban de tener el mejor plano de la ‘lideresa’. Un revuelo que ha provocado que pasara casi de puntillas la segunda parte de la frase: “La política es mi vida”.
Es precisamente este recordatorio el que ha provocado que muchos de los asistentes al acto de Botella hayan remarcado que la expresidenta madrileña no cierra la puerta a acabar en el consistorio de la capital.
Y es que, según aseguran fuentes políticas, hoy por hoy el Ayuntamiento de la ciudad colmaría las ansias de poder de Aguirre a la espera de ver qué pasa con Mariano Rajoy. De todos es conocido que a la ‘lideresa’, igual que a muchos otros dirigentes del PP, le encantaría presidir el Gobierno de España, pero mientras el puesto de alcaldesa le permitiría mezclarse con la gente y estar en la calle, algo que le encanta.
