Chaves asegura que se siente en situación de “indefensión” y víctima de una situación «kafkiana» por el último auto de la juez Alaya que da el primer paso para imputarle en la causa de los ERE.
El expresidente de la Junta andaluza, Manuel Chaves, se ha mostrado «tranquilo» después de darse a conocer el auto. «No me siento imputado porque el auto, que es innecesario y gratuito, no imputa a nadie. Mi situación y la de los citados no ha cambiado».
Además, en una entrevista en la SER, Chaves se pregunta qué objetivo persigue la juez, «si hubiera algún indicio de delito, la obligación de la magistrada era enviar la causa al Tribunal Supremo», recuerda.
Asimismo, critica que el auto le coloca en «una situación de indefensión pública y nos pone como delincuentes». La juez, según el expresidente andaluz, ha vertido una serie de insinuaciones sobre la carga incriminatoria que no pasan de ahí, y recuerda de nuevo su obligación de acudir al Tribunal Supremo.
El expresidente andaluz, que ha admitido que no se puede «sentir satisfecho con lo que ha ocurrido» en el caso ERE «y seguramente será un peso que llevaré durante mucho tiempo», se ha preguntado «por qué precisamente en un día en que el Gobierno de Andalucía toma posesión la jueza dicta ese auto creando la confusión que ha creado, colocando sin ninguna razón ni indicio como sospechosos a personas sobre las que no existe ningún indicio».
Tras subrayar las «muchas coincidencias de autos de la jueza con acontecimientos o decisiones importantes de la Junta de Andalucía», Chaves ha anunciado que sus abogados estudian vías para garantizar su derecho a la «tutela judicial efectiva», entre las que ha citado la posibilidad de dirigirse al TS para que a su vez se dirija a la juez Alaya «y le pida si hay indicios que le remita el caso» para evitar la situación de «indefensión que nos ha creado ante la opinión pública».