La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) sigue adelante con su lucha. Ahora ha creado un manual de desobediencia civil para “recuperar” las viviendas vacías de las entidades financieras y realojar en ellas a familias que han sido desahuciadas. La campaña ‘Obra Social de la PAH’ se ha lanzado para exigir a la banca que los pisos vacíos pasen a formar parte de un parque público de alquiler social.
Según recoge el colectivo en su página web, “las medidas de la ILP son más necesarias que nunca”, por lo que la PAH ha creado “un manual de desobediencia civil de 25 páginas con información práctica sobre cómo realojar familias mediante alguna de las dos vías contempladas en esta campaña: las ocupaciones individuales en las viviendas de las que hemos sido desahuciados y las recuperaciones de bloques enteros propiedad de la banca”.
La PAH señala que “además de la dación en pago y la moratoria en los desahucios, el alquiler social es una medida fundamental” ya que, sin ella, “aumentan los casos de familias que, aún habiendo solucionado el problema de la deuda -consiguiendo la dación- ven denegadas sus peticiones de alquiler social a los bancos”. Un problema al que se suma el de las personas desahuciadas.
“Las administraciones locales y autonómicas dicen no poder hacer frente a la creciente emergencia habitacional, por lo que es fácil entender la urgencia social por recuperar las viviendas vacías en manos de las entidades financieras y darles su función social”.
Y precisamente con ese objetivo nace la campaña ‘Obra Social de la PAH’, que pretende que “las viviendas vacías en manos de la banca y el SAREB pasen a formar parte de un parque público de alquiler social”.
Según el colectivo, gracias a esta campaña la Plataforma “cuenta ya con 12 edificios recuperados de la banca” en los que se ha realojado a familias, una iniciativa que se ha llevado a cabo “de manera organizada, protocolizada y encaminada a conseguir pequeñas grandes victorias”. “Cada vez son más los núcleos de la PAH que no tienen más remedio que sumarse a esta campaña”, y el interés creciente de muchos otros colectivos ha empujado a la Plataforma a editar este dossier de desobediencia civil.
