El Ministerio de Hacienda quiere meter tijera a las nóminas de alcaldes y concejales para que ningún representante de la administración local cobre más que un secretario de Estado. Es decir, no superen los 68.000 euros al año. Una decisión del departamento de Cristóbal Montoro que supondrá una importante reducción en los sueldos de muchos regidores, entre ellos, el de Ana Botella que se reducirán en más de 26.700 euros. Actualmente la retribución anual bruta de la alcaldesa de Madrid roza los 94.700 euros.
Los sueldos de los alcaldes y concejales dejarán de fijarse en los plenos municipales y pasarán a depender de unas tablas salariales en las que está trabajando Hacienda para homologarlos con las retribuciones de los altos cargos de la Administración del Estado. Además de este tope, las nóminas tendrán en cuenta el número de habitantes de la corporación local.
Una decisión que podrá beneficiar a muchos concejales y regidores que actualmente no tienen retribuciones por su labor municipal, pero también perjudicará a otros alcaldes que cobran como si fueran presidentes del Gobierno. Este es el caso de Ana Botella.
Mientras que Mariano Rajoy cobra 72.000 euros, la regidora madrileña tiene una retribución anual bruta de 94.700 euros. Y eso que ambos se bajaron el sueldo antes de verano un 7,1%.
Con los planes de Montoro en la mano, Botella se vería obligada a dejar de percibir más de 26.700 euros al año.
En la misma situación que la mujer de Aznar se encuentra el regidor de Barcelona, Xavier Trias, que supera el mencionado límite de los 68.000 euros de un secretario de Estado.
