La ‘bomba’ mediática que ha lanzado Esperanza Aguirre con el anuncio de su dimisión ha puesto en marcha las quinielas sobre cuáles son las verdaderas razones que han llevado a la ‘lideresa’ a abandonar su feudo. La hasta ahora presidenta de la Comunidad de Madrid no ha avanzado cuál es el motivo que le ha llevado a tomar esta decisión, aunque la teoría más afianzada es un posible agravamiento de su enfermedad.
La emoción que ha mostrado Esperanza Aguirre al recordar el cáncer de mama que la mantuvo alejada de la primera fila política durante unos meses el año pasado ha hecho saltar las alarmas. “Yo tengo una enfermedad seria y de la que supuestamente estoy curada, pero que es sería y grave”, reconocía la popular en la rueda de prensa en la que ha anunciado su renuncia.
Unas circunstancias personales que “claro que han influido” en su decisión, por lo que la posibilidad de la recaída es el argumento más repetido para explicar la marcha de la dirigente popular.
No obstante, no es la única posibilidad que se escucha. Otros muchos ven en la llegada de Eurovegas a la capital la verdadera razón de la dimisión de Aguirre. La posibilidad de que el macrocomplejo de juego pudiese revelar una financiación oculta del PP de Madrid, unida a los interrogantes que proliferan día a día sobre la propiedad de los terrenos en los que se instalaría el proyecto de Sheldon Adelson, hace que muchos apuesten por este como el caballo ganador de esta particular quiniela.
También hay otros, como el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran y Lleida, o el líder de IU en la Comunidad de Madrid, Gregorio Gordo, que apuestan por diferencias irreconciliables entre Aguirre y Mariano Rajoy para explicar esta noticia.
Mientras que el nacionalista catalán se ha apresurado a asegurar que “las diferencias con Rajoy son casi habituales, en cualquiera de los casos notorias”, Gordo cree que la “presión social” y las “desavenencias” con el presidente del Gobierno y de su partido han hecho mella en la decisión de la ‘lideresa’.
Asimismo, Gregorio Gordo también ha apuntado al desgaste mostrado por la ‘lideresa’ en el Debate sobre el Estado de la Región de la semana pasada, una cita en la que se evidenció el “estado de ansiedad, por no decir histerismo”, de Aguirre.
Por último, hay opiniones más livianas que aseguran que la dimisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid se debe a que su situación en política “le aburre soberanamente”. Así se lo podría haber comunicado la propia Aguirre a sus colaboradores y amigos hace unos meses, a los que habría asegurado estar cansada de acudir a pequeñas localidades y de tratar asuntos menores.
Además, esta misma teoría defiende que Esperanza era consciente de que había llegado al máximo de lo que podía aspirar en política, dadas las circunstancias del país, del Gobierno y del PP, lo que le habría llevado a tomar esta decisión.
