Las chispas vuelven a saltar entre Rita Barberá y Alberto Fabra, esta vez a causa de las Fallas. La alcaldesa de Valencia y el presidente de la Generalitat se han enfrentado de nuevo ante la intención del jefe del Ejecutivo autonómico de cambiar todos los festivos de la región a lunes, algo que Barberá no ha tardado en criticar.
La tradicional celebración del día grande de las Fallas, el 19 de marzo, corre peligro. Alberto Fabra ha anunciado esta semana su intención de trasladar todos los festivos de la Comunidad Valenciana a los lunes, lo que dejaría a los falleros desubicados ante un cambio que acabaría de un plumazo con las costumbres regionales, que dicen que la quema de las fallas se realiza el día de San José.
Y eso es algo que Rita Barberá no parece dispuesta a tolerar. La alcaldesa de la capital del Turia se ha convertido en abanderada de la fiesta y la tradición valenciana y ha puesto en tela de juicio la decisión de Fabra de acabar con los macropuentes, tal y como ha exigido el Gobierno central, y mejorar así la productividad empresarial.
Barberá indicó que, antes de tomar cualquier decisión, el presidente de la Generalitat tendrá que abrir “un debate” en el que se debe dar voz de los falleros. Esto “no es una decisión de hoy para mañana”, apuntó, sino que se decidirá en septiembre, cuando se apruebe el calendario oficial de días festivos.
Es más, recordó que Mariano Rajoy dijo en su discurso de investidura que se salvarían de la aplicación de esta medida las fiestas de “gran arraigo popular”, como son las Fallas valencianas.
La defensa acérrima que ha hecho Barberá de la fiesta regional, unida a las críticas que han proferido los grupos de la oposición y el propio Arzobispado de Valencia, que ha anunciado que no cambiará su calendario, ha obligado a Alberto Fabra a ‘recular’ y a anunciar que abrirá un debate con falleros e implicados antes de tomar una decisión.
Tras asegurar esta mañana en Twitter que con este cambio de festivos sólo pretende “ganar a la crisis”, ya que es una iniciativa que busca que el impacto de estos días sea menor y así evitar aumentar el paro, el presidente de la Generalitat ha asegurado también en la red social que la decisión “se tomará antes del 30 de septiembre”, por lo que todavía hay “tiempo para mejorar la propuesta y conectar con los colectivos”.
El anuncio de Fabra ha tensado de nuevo sus relaciones con Barberá, quien ya mostró su malestar contra el giro que dio el presidente de la Generalitat en la política de grandes eventos como la Fórmula 1, así como en dar por enterrada la era de Francisco Camps, en la que ella tenía amplía influencia y protagonismo.
