Las protestas contra los recortes aprobados por Mariano Rajoy no cesarán en los meses de verano. Así lo ha asegurado CCOO en un comunicado, en el que llama a los funcionarios a concentrarse cada viernes de julio y agosto frente a los ayuntamientos de la capital para denunciar esta “agresión sin precedentes”.
“Una agresión a las personas en paro, a los empleados públicos, a la economía y a la democracia”. Así define CCOO de Madrid la última batería de recortes aprobada por el Gobierno, que ha decidido concentrarse en cada ayuntamiento de la capital cada viernes a las 11 horas para criticar este ataque “a los fundamentos que hicieron posible la Constitución y a la propia democracia, una agresión de consecuencias, laborales, sociales, económicas y políticas que tendrá una respuesta sindical inmediata”.
Según indica la formación en un comunicado, “la agresión a los empleados públicos supone una suma y sigue intolerable e inútil para conseguir la reactivación económica y creación de empleo”. CCOO considera que “la eliminación de la paga de diciembre, junto con el resto de medidas supone un robo a los empleados públicos, implica agudizar más la crisis económica y apunta hacia un futuro cercano y lejano sin derechos, sin servicios públicos y sin convivencia social”.
“Los empleados públicos y el conjunto de la clase trabajadora” son los que dan dinero a los bancos y los Estados “a fondo perdido y no para reactivar la economía, si no para cubrir sus pérdidas derivadas de la especulación y avaricia que provocaron la burbuja financiera e inmobiliaria”. Por ello, CCOO exige que no quiten a los españoles su salario, sus servicios públicos y mucho menos su dignidad.
Ante esta situación, el colectivo de funcionarios, que según el sindicato ha sufrido en los últimos años “destrucción de empleo y despidos colectivos”, una “bajada salarial acumulada de un 20%”, una “ampliación de la jornada de trabajo y una disminución de vacaciones”, así como “una campaña brutal de desprestigio ante los ciudadanos, mostrándolos como privilegiados, corresponsables de la crisis e insostenibles económicamente”, ha decidido decir basta a las medidas del Gobierno.
El sindicato “está estudiando todas las medidas legales para oponerse a esta agresión, sin descartar ningún tipo de movilización”, aunque la primera acción que llevará a cabo será la de concentrarse cada viernes en los ayuntamientos madrileños.









