El magistrado del Tribunal Supremo, Alberto Jorge Barreiro, instructor del proceso contra Baltasar Garzón por las escuchas a los imputados del ‘caso Gürtel’ y sus abogados, ha rechazado las diligencias en las que el juez de la Audiencia Nacional solicitaba la declaración de los policías adscritos al caso de financiación ilegal del PP y del juez Antonio Pedreira, sucesor suyo en la investigación de la causa.
Según ha argumentado Barreiro en un auto, las pruebas solicitadas por Garzón “alargarían la instrucción con investigaciones ajenas al objeto del proceso” y no servirían para “excluir los indicios delictivos”.
Así, el magistrado del Tribunal Supremo ha considerado que “cualesquiera que fueren los indicios que tuviera contra los imputados, no podía instalar micrófonos en los locutorios penitenciarios”, ya que, explica el magistrado, “los indicios incriminatorios no se extendían a los letrados” porque “el titular del ‘caso Gürtel” en la Audiencia Nacional, “no tenía indicio alguno” de la implicación de los abogados en la financiación ilegal. Por ello, ha concluido Barreiro, Garzón podría haber violado derechos constitucionales de los presos como la defensa y la confidencialidad de la relación interno-abogado.
La desestimación de Barreiro llega un día después de que su compañero del Supremo Miguel Colmenero, rechazara las pruebas solicitadas por Garzón en la causa sobre sus cobros en Nueva York.
