A poco más de dos meses de las elecciones autonómicas y locales de mayo, el PP ha anunciado su primera baja en las listas al Ayuntamiento de Santiago de Compostela. Se trata de Ángel Espadas, que ha renunciado también a su actual cargo de edil en la capital gallega, después de que, el pasado sábado, fuera detenido por la Guardia Civil al encontrarlo ebrio y dormido al volante.
Por su parte, el portavoz del PP local, Gerardo Conde Roa, ha defendido que “un error humano no desmerece toda una trayectoria”, en alusión a Espadas, conocido por infiltrarse hace años entre los estudiantes que protagonizaban el “botellón”, para denunciar sus efectos.
Es la segunda vez en algo más de un año que un dirigente del PP da positivo en un control de alcoholemia. En febrero del año pasado, el diputado Nacho Uriarte fue sorprendido conduciendo ebrio lo que le obligó a dimitir como vocal de la Comisión de Seguridad Vial del Congreso. El 17 de enero de este año fue condenado por el Supremo (tribunal encargado de la causa por su condición de aforado) a una multa de 2.400 euros y ocho meses de retirada del carné de conducir.
