Continúa sin haber acuerdo entre el Ejecutivo y los representantes sindicales en cuanto a la reforma de las pensiones. Cuatro intensas jornadas de encuentros no han bastado para zanjar el punto principal del debate, la ampliación de la edad de la jubilación hasta los 67 años.
El cuarto día de encuentros del Ejecutivo y los sindicatos mayoritarios acaba en agua de borrajas. La presencia este fin de semana del vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, y de la responsable económica, Elena Salgado, no ha servido para que el Gobierno acerque hoy posiciones sobre la reforma de las pensiones con los secretarios generales de UGT y Comisiones Obreras, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo.
La reunión se ha llevado a cabo desde las diez de la mañana hasta mas allá del mediodía sin que se haya producido avance alguno. La principal aspereza que han de limar es el aumento de la edad de jubilación a los 67 años. El Gobierno quiere llevar a cabo esta medida el próximo 28 de enero con el respaldo de los sindicatos, de manera obligatoria aunque su implantación va a ser gradual.
La propuesta no fue bien recibida por los sindicatos que amenazaron con llevar a cabo la segunda huelga general, después de la realizada el pasado 29 de septiembre. Tras el fracaso de las pasadas reuniones, los convocados volverán a la mesa en unos días, tras sopesar el impacto de las reformas.
Por su parte, la vicepresidenta económica, Elena Salgado, ha concluido tras la reunión que a pesar de las alejadas posiciones de ambos frentes de la negociación, el Ejecutivo está abierto al diálogo en lo referente al periodo transitorio en el que se haría efectivo el retiro. Sobre la falta de acuerdo la ministra añade que “vamos a hacer todo lo posible” para que no se repita otra huelga general.
