El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha apartado al responsable de Asuntos Exteriores del Gobierno, Miguel Ángel Moratinos, de la reunión que mantendrá el próximo lunes en Rabat con el titular de Interior marroquí, Taieb Cherkaoui, para analizar la tensión en la frontera con Melilla. Fuentes del departamento de Rubalcaba han destacado a EL BOLETIN que se trata de un viaje del ministro ante el que ni se va a pedir consejo a Moratinos ni se va a mantener ningún encuentro con él para preparar la posición del Ejecutivo que se trasladará a Marruecos tras su bloqueo.
Un verano más, nuestro ‘vecino’ marroquí ha desatado un nuevo conflicto con el cierre de la frontera con Melilla. Un incidente al que hay que sumar la invasión y posterior recuperación de la Isla de Perejil en las vacaciones estivales de 2002, la avalancha de inmigrantes que intentaron saltar las vallas fronterizas para entrar en España o la reciente huelga de hambre de la activista saharaui Aminatu Haidar a finales del año pasado.
En esta nueva situación, las cualidades negociadoras del Gobierno están otra vez a examen, aunque esta vez el encargado no será Miguel Ángel Moratinos. El ministro de Exteriores tiene una reputación como especialista en Marruecos y Oriente Medio, pero en este conflicto está desaparecido. Nada se sabe del titular de Exteriores desde que se iniciara el bloqueo de la frontera y que se va a mantener ante la decisión de Rubalcaba de no contar con su experiencia en el encuentro del próximo lunes.
“Es un viaje de Rubalcaba y una reunión con su homólogo en la que no hace falta Moratinos”, han destacado fuentes de Interior a este diario. Decisión que han intentado restar importancia desde Exteriores. “Es verdad que no va a haber ni antes ni después del viaje de Rubalcaba un encuentro con el jefe de la diplomacia, pero es habitual la coordinación entre ambos en todas las cuestiones”, han señalado.
Algunos observadores políticos aseguran que todo esto se debe a que Moratinos, a diferencia con este conflicto, sí quiso hacerse la foto con la Iglesia cubana y el Gobierno de Raúl Castro con el resultado de la excarcelación de presos que han sido trasladados a España, unos excarcelados con los que el Gobierno no sabe qué hacer. Ahora, al ministro no le interesa implicarse.
Rubalcaba no sólo va a tener que tratar con su homólogo cuestiones como el bloqueo en la frontera, sino que desde la propia Melilla y las fuerzas de seguridad del Estado le han pedido apoyar a “las compañeras del Cuerpo Nacional de Policía” que sufren los ataques de algunos sectores marroquíes a las que ridiculizan con carteles en la conocida como ‘tierra de nadie’ -distancia de 500 metros que separan ambos lados de la frontera-.
Para escenificar este respaldo, el portavoz del Sindicato Unificado de la Policía, José María Benito, ha pedido a Rubalcaba hacer una parada en su viaje en Melilla. “Hay un sitio dónde no debería faltar en ningún caso, que era en Melilla”.
