Los magistrados Concepción Espejel y Enrique López han admitido a trámite un recurso presentado por la asociación Dignidad y Justicia tras el archivo de Pedraz. La Audiencia Nacional ha ordenado al juez Santiago Pedraz que vuelva a reabrir el caso de los ‘tuits’ de Guillermo Zapata, concejal de Ahora Madrid en el Ayuntamiento de la capital. La Sección Segunda de la Sala de lo Penal ha aceptado el recurso de la asociación Dignidad y Justicia (DyL) con el voto a favor de Concepción Espejel y Enrique López, magistrados recursados por su afinidad con el PP, y el voto discrepante de José Ricardo de Prada.
La Sala ha considerado que los comentarios que hizo en Twitter en los que reproducía dos chistes sobre Irene Villa y el Holocausto pueden ser susceptibles de “entrañar descrédito, menosprecio o humillación a las víctimas de los delitos terroristas o de sus familiares”. En lo dictado a Pedraz se le ha ordenado que practique una serie de diligencias donde se tome declaración a las víctimas del terrorismo que solicitaba DyL y así concluir la instrucción mandando a juicio al edil.
A pesar del voto favorable de los jueces afines al Partido Popular, el documento del tribunal ha contado con el voto particular del magistrado José Ricardo de Prada que se ha mostrado contrario a la estimación del recurso de apelación en el que concluye que no se ha producido humillación de la víctima y que desde los tribunales «no podemos convertirnos en meros censores de conductas atinentes a la libertad de expresión».
Cabe recordar que el pasado octubre, Pedraz archivó la causa contra el concejal después de tomarle declaración en calidad de imputado, obligado por la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. En su auto, el magistrado aludió a la libertad de expresión “en términos de debate” y consideró que no hay delito porque no hay “intención secundaria, ni culpa consciente”.
Un caso que continúa coleando a pesar de lo dictado por Pedraz y de la opinión de Irene Villa que remitió un escrito en el que aseguraba no haberse sentido humillada. A pesar de lo manifestado por Villa, la Audiencia Nacional afirmó que “el perdón de una víctima en concreto, aun la víctima aludida, más allá del ejemplo de generosidad desplegado por la misma, puede no tener relevancia”, rezó el auto emitido.
