La presidenta de la Comunidad de Madrid se alegró en un acto del PP en Valladolid de que nadie le preguntase por la corrupción. Un micrófono abierto ha jugado una mala pasada este fin de semana a Cristina Cifuentes. “Qué gusto venir a un sitio, ahora que estoy fuera de cámara, y que no me pregunten por la Púnica, por el no sé qué o por el no sé cuántos”, afirmó este sábado la presidenta de la Comunidad de Madrid en ‘petit comité’ en un acto del PP en Valladolid sin saber que el micro todavía estaba abierto.
Previamente, según informa la SER, la jefa del Ejecutivo autonómico aconsejó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sobre los debates electorales. “En Madrid hice un debate que fue muy cuestionado porque me enfrenté sola a seis de mis adversarios. A mí mal no me fue”, resaltó Cifuentes, que añadió que ella no va a decirle al líder del PP lo que tiene que hacer.
La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Purificación Causapié, ha afirmado que “es absolutamente irresponsable decir me voy porque así nadie me pregunta”. “Lo que hay que hacer es no esperar a que les pregunten, sino responder sobre la Púnica a los madrileños”, ha defendido la dirigente socialista.
