El extesorero invitó a refrescos a sus compañeros para celebrar “que no habían podido con él”. Está claro que Luis Bárcenas, esté donde esté no pasa desapercibido. Incluso en la cárcel ha dejado huella entre sus compañeros, con los que compartió su última noche en prisión entre cantos y coca-colas, celebrando que “no habían podido con él”.
“De Baños era mi madre, mi padre de Guarromán…”, entonó el extesorero la madrugada del 23 de enero, entre otras ranchera y temas clásicos españoles. Así celebró junto con algunos compañeros de módulo su puesta en libertad, según ha asegurado su hijo, Willy Bárcenas, en una entrevista concedida a la revista Vice.
Además, invitó a algunos presos a Coca-Cola de la máquina, pero no sólo para despedirse, si no también para demostrar que “no habían podido con él”, según ha explicado su hijo.
Y es que, Bárcenas Junior ha confesado que cuando su padre “reconoció la existencia de una ‘contabilidad b’ en el PP, cambió radicalmente el trato que recibía por parte del director de Soto del Real y del secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste. Mi padre se quedó solo, sin un apoyo en el partido y sabiéndose el blanco de todas las tertulias e informativos”.
Para animarle su hijo le hizo llegar a la cárcel una canción que grabó él mismo, titulada ‘Father and Son‘, de Cat Stevens, una de las canciones favoritas del extesorero.
Y es que, Willy Bárcenas tiene un grupo de música llamado Taburete, del que también forma parte uno de los nietos del expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán, que lanzará un disco a mediados de este mes.
